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Bailar a ritmo de bolero

Danza Canal se convierte en centro de referencia nacional e internacional para bailarines, coreógrafos y todos aquellos que participan en esta disciplina

Aurora Intxausti
La bailaora Olga Pericet, ensayando 'El cuerpo infinito', en Danza Canal de Madrid.
La bailaora Olga Pericet, ensayando 'El cuerpo infinito', en Danza Canal de Madrid.Luis Sevillano

Iratxe Ansa se mueve de un lado al otro del escenario, gira sus pies y sus manos en un único movimiento. Serpentea por el suelo como si reptara mientras el bailarín italocroata Igor Bacovich analiza sus giros a través del espejo y trata de emularlos. Ansa, como coreógrafa, e Igor, como bailarín, forman Metamorphosis y están preparado el proyecto elegido por Abierto en Canal para estrenarlo al inicio de la próxima temporada, Dog Talks. Esta es una de las líneas por las que apuesta Natalia Álvarez Simó, directora de Danza Canal. Junto el apoyo a la creación ha desarrollado una serie de actividades destinadas al público, tanto a aquellas personas que no saben nada de este mundo artístico como para aquellos que están a la última. “En Canal se trata de ofrecer lo más contemporáneo de lo que se está haciendo tanto en teatros nacionales como internacionales”, indica Álvarez.

Iratxe es una de las muchas bailarinas españolas que han desarrollado su carrera profesional fuera de España —Holanda, Londres, París, Estados Unidos, Canadá, Nueva Zelanda y Australia— y con escasa trayectoria profesional en su país. “Es bueno para un artista trabajar fuera, estar alejado de la comodidad y moverte en todo tipo de escenarios. Yo salí con 14 años y, aunque era muy niña, estoy contenta de todo lo que he hecho. Ahora como Metamorphosis estamos encontrando hueco. El proyecto que estamos desarrollando en Canal es interesante para nosotros y para aquellos que están inmersos en esta profesión. Es una puerta interesante”, matiza Iratxe, empapada en sudor por el esfuerzo físico que acaba de realizar en el estudio.

En 2018, se registraron 268 solicitudes de compañías residentes y de estas se seleccionaron 23. Y 43 accedieron a la modalidad de estancias intermitentes. Las residentes reciben durante todo el año acompañamiento artístico y asesoramiento profesional desde producción a distribución de las artes escénicas.

Unos metros más allá, la artista Olga Pericet, Premio Nacional de Danza 2018, espera en una sala de ensayo del Canal el rasgueo de la guitarra y las palmas y el cante de sus compañeros para empezar a moverse. Esta pequeña mujer, una de las grandes representantes del flamenco contemporáneo, se hace grande cuando mueve sus brazos y taconea. Emociona, incluso en un ensayo, con el sentimiento que transmite a través de sus pequeños y graciles movimientos. Inunda el espacio con su cuerpo como el título de su espectáculo Un cuerpo infinito, aunque en esta ocasión sea en homenaje a la gran bailaora Carmen Amaya. En su proyecto se sumerge en un viaje de búsqueda para dialogar con el legado de la bailaora. “Este teatro es para nosotros, los artistas que nos dedicamos a este arte la casa de la danza. Se involucra y hay un empeño por apostar por las compañías. El flamenco está situado fuera de España en primera línea y es una de las artes que en muchos lugares de Europa es prioritario. Sé de antemano que en Londres o París las entradas para mi espectáculo estarán vendidas. En España, no existe tanta programación y por ello yo trabajo más del 70% de la temporada fuera de aquí”, apostilla Pericet. En Canal estará la próxima semana. Y las entradas están agotadas.

La compañía Metamorphosis con Igor Bacovich e Iratxee Ansa.
La compañía Metamorphosis con Igor Bacovich e Iratxee Ansa.Luis Sevillano

Danza Canal pretende, según el consejero de Cultura, Jaime de los Santos, “un punto de encuentro entre público y profesionales, el espacio de reflexión y debate sobre la danza, acercar al espectador a los grandes creadores y destacar a las figuras más relevantes”.

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Por los pasillos se escuchan los primeros compases de El bolero de Ravel y tras las puertas se encuentran ensayando el coreógrafo Jesús Rubio y una docena de bailarines en una de las nueve salas de ensayo que tiene Danza Canal. “Esta música me dio fuerzas para seguir adelante. Me ha hecho salir de la oscuridad total. Me salvó de la soledad en la que estaba inmerso. Me dio fuerza suficiente para luchar por mi proyecto”, señala Rubio. El coreógrafo fue seleccionado por Danza Canal en 2017 para participar en el programa Abierto en Canal, en el que ahora participa, entre otros, Metamorphosis. El nuevo trabajo de Rubio es una coproducción de los Teatros del Canal con el Mercat de Les Flors, Gran Bolero. Jesús Rubio representó a España en la plataforma europea Aerowaves, que muestra a los artistas con mayor talento en la danza. “El lugar que me ha permitido saltar de una estructura pequeña a una mayor de trabajar con dos bailarines a 12”.

El coreógrafo Jesús Rubio junto a los bailarines de Gran Bolero.
El coreógrafo Jesús Rubio junto a los bailarines de Gran Bolero.Luis Sevillano

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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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