El Seprona rescata 35 perros en Rianxo que supuestamente se alimentaban de otros animales en descomposición

"Por la cantidad de restos putrefactos de otros animales en el suelo, es posible que este fuese el tipo de alimentación que ingerían los canes para subsistir". El equipo del Seprona de la Guardia Civil de Noia es bastante gráfico al describir el escenario de los hechos de su última investigación en Rianxo. "Apenas había un trozo de superficie donde no hubieran restos de orines, excrementos y pedazos de reses muertas". Aunque había ya algún perro muerto, de este paraje dantesco los agentes han logrado rescatar 25 canes adultos y 10 cachorros, además de 18 terneros y un caballo. Presentaban evidentes signos de maltrato y abandono; estaban escuálidos, invadidos de parásitos y en unos cuantos casos contagiados de sarna.

El supuesto propietario de todos estos animales está siendo investigado por un delito de maltrato animal después del hallazgo, que según la Guardia Civil se produjo durante unas labores rutinarias de control. No es la primera vez que se vincula a este vecino de Rianxo con este tipo de delitos de crueldad animal. Todo lo contrario: es un "viejo conocido del Seprona" y acumula "numerosos antecedentes por hechos similares", según informa una portavoz del cuerpo en A Coruña. El veterinario que acudió al lugar confirmó lo que parecía obvio: que los animales no tenían cartilla de vacunación y que no estaban atendidos. Solo cinco de ellos llevaban microchip.

En el lugar no se encontró ningún resto de pienso o de comida para los perros. Los agentes "desconocen" de qué podían alimentarse, pero sospechan que de los restos en descomposición de otros animales que había por el suelo. Los canes rescatados han sido puestos a disposición del juzgado de Padrón, mientras que los terneros y el caballo han sido entregados a Medio Rural.

Leyes que no se cumplen

Los colectivos animalistas Libera! y FFW (Fundación Franz Weber) han recordado esta tarde que la actuación del Seprona de Noia ha sacado a la luz "un caso más de terrible maltrato animal" que se suma a todos los que llevan denunciado en los últimos meses, como el del perro hallado con un lazo de caza en Pontevedra y varios animales de compañía "tiroteados o muertos a causa de una paliza", como sucedió en Cervo (Lugo), donde no se ha logrado dar "con el autor de este acto de auténtico sadismo". Estos dos grupos animalistas ofrecen semana tras semana nuevas recompensas a quienes aporten datos sobre los autores de los abundantes casos de maltrato animal que van aflorando, pero jamás han conseguido entregar el dinero prometido porque nunca aparecen pistas certeras.

Los animalistas recuerdan que "la norma autonómica de 2017 ya obligaba a realizar una comunicación previa si una vivienda albergaba más de cinco canes". Sin embargo, esto "no parece haberse cumplido en el suceso de Rianxo", por lo que creen necesario "reforzar los servicios de inspección". La actual ley aprobada por la Xunta contempla "herramientas administrativas" para "realizar una vigilancia activa de las condiciones de los animales", pero el reglamento, que está por desarrollar, "debe ser más concreto contra prácticas crueles, como el encadenamiento continuado", o especificar "programas formativos para técnicos, personal funcionario y fuerzas de seguridad".