Los Mossos, en pie de guerra por sus condiciones laborales

Los Mossos d’Esquadra demostraron este lunes al consejero de Interior, Miquel Buch, su disgusto por lo que consideran que son unas pésimas condiciones laborales. Lo hicieron reuniendo a un millar de agentes frente al Departamento de Interior, donde se celebraba un consejo de policía. Los agentes arrancaron el compromiso a Buch de la creación de una mesa para negociar mejoras laborales.Los más madrugadores se dieron cita a las ocho de la mañana frente a la sede de Interior. La protesta se ha ido fraguando a través de un grupo de Telegram, del que ha surgido la plataforma MosS.O.S. Sus principales demandas, a la que dan apoyo todos los sindicatos del cuerpo, es el incremento de efectivos y el pago de las horas extras. El cuerpo tiene un déficit de más de mil policías, debido a que desde 2012 no se han convocado nuevas promociones.

Los policías se mantuvieron frente a la sede del Departamento hasta que acabó el consejo de policía, en el que los sindicatos se reúnen con los responsables de Interior. Amenizaron la marcha —a la que asistieron vestidos de negro, para evitar cualquier politización de la misma— con cánticos y petardos, a la espera de que acabase la reunión.

Los sindicatos policiales, que asistieron también a la concentración y llamaron a sus afiliados a asistir a la protesta, advirtieron a Interior de que sería la primera de sus reivindicaciones si el Departamento no escuchaba sus demandas.

A las dos de la tarde, al acabar el consejo, el consejero del Interior y uno de los portavoces sindicales, David José Mañas, del Sindicat de Policies de Catalunya (SPC), en nombre también del resto de sindicatos, anunciaron un acuerdo: la creación de una mesa para negociar las mejoras laborales.

Buch se mostró “satisfecho” por el acuerdo, y admitió que los mossos “han perdido una serie de derechos” laborales. Por ello, se comprometió a “trabajar intensamente” para atender a sus demandas. Entre ellas, está el abono de las horas extras que los agentes han llevado a cabo los últimos meses, con el referéndum ilegalizado del 1 de octubre y las elecciones del 21 de diciembre.

El consejero de Interior aseguró que ya hay un calendario y un prespuesto comprometido para abonar esas horas extras de antes de la protesta. También adujo que intervención del Estado, conocido como el 155, había tenido “efectos negativos” en la consejería y había impedido mejorar la situación de los agentes. “Llevamos meses trabajando para recuperar los derechos de los trabajadores públicos”, indicó Buch.

“Veremos con el tiempo qué hay de verdad y qué no, y cómo evoluciona la negociación”, dijo Mañas, que se mostró satisfecho con el acuerdo, que definió como “un punto de partida”.