Cae una banda que robaba turismos de lujo en un minuto en Madrid

Mercedes, BMW y Porsche. Esas eran las tres marcas preferidas por un grupo desarticulado por el Sector de Tráfico de Madrid de la Guardia Civil, al que se le imputa la sustracción de más de 60 vehículos. La organización operaba por encargo para hacerse con esos turismos valorados en más de 100.000 euros por unidad. En otras ocasiones, robaban los coches para despiezarlos y vender los recambios en sus propios talleres o exportarlos a Polonia y Bulgaria. 

La banda, formada por 12 personas de diferentes nacionalidades, era capaz de sustraer un vehículo en un tiempo récord de menos de un minuto, según ha explicado el teniente coronel jefe del sector de Tráfico de Madrid, Benito Monzón. Los integrantes de la banda forzaban las cerraduras con ganzúas y después inutilizaban las centralitas electrónicas de los vehículos. De esta manera, podían arrancarlos y llevárselos, según han destacado fuentes de la organización.

Los agentes del Grupo de Investigación y Análisis del Sector de Tráfico de Madrid iniciaron las investigaciones el pasado marzo cuando se produjo un importante aumento de robos de turismos en la región madrileña "mediante el uso de tecnología avanzada y métodos altamente especializados", según fuentes del instituto armado. Los guardias localizaron una finca situada en El Álamo, donde hallaron cinco turismos de alta gama que estaban siendo despiezados y que habían sido previamente sustraídos.

Los investigadores centraron todos sus esfuerzos en la localización de las infraestructuras utilizadas por la organización criminal, permitiendo desenmarañar el entramado delincuencial, descubriendo la utilización de cuatro naves y fincas cuidadosamente seleccionadas y equipadas. En las referidas naves se llevaban a cabo las distintas fases de la actividad delictiva, tales como la ocultación de los vehículos robados, el despiece, y ensamblaje y “maquillaje” de las piezas.

El grupo estaba liderado por un ciudadano de origen rumano que captaba a los colaboradores y de ordenar las operaciones que se debían realizar sobre los vehículos sustraídos, así como de darle salida a las piezas en el mercado negro.

Maquillaje de piezas

El resto de detenidos robaban los vehículos. Otros se dedicaban al despiece, a la reparación y maquillaje de piezas, al envío de material dentro del territorio nacional, Polonia y Bulgaria, a la coordinación de los distintos talleres de despiece e incluso tenían a una persona encargada de realizar estafas a las compañías aseguradoras sobre supuestos siniestros de vehículos.

Según la Guardia Civil, los integrantes del grupo tenían conocimientos especializados en el uso de maquinaria, mecánica y electrónica. También manejaban aparatos para el troquelado de bastidores, falsificación de números de serie, apertura digital y arranque de vehículos, ejerciendo la actividad delictiva con utensilios y maquinaria de última generación.

Los coches eran trasladados a fincas y desguaces en El Álamo, Navalcarnero, San Lorenzo del Escorial y Yuncos (Toledo) donde procedían al despiece y maquillaje de las piezas para así después darle salida por piezas en el mercado negro nacional, polaco y búlgaro. Tras efectuar la entrada y registro en estos lugares, los agentes hallaron millones de piezas de más de sesenta vehículos de alta gama y material electrónico para cometer los ilícitos cuyo valor supera el millón y medio de euros.

Los detenidos son 12 hombres de nacionalidades española, palestina, magrebí, polaca y búlgara, con edades comprendidas entre los 19 y los 45 y con un amplio historial de antecedentes por hechos relacionados con estafas y robo de vehículos. Por estos hechos se les imputa un delito de pertenencia a organización criminal y delitos de robos de vehículos.