El ‘president’ copia la estructura de Govern de Puigdemont
Torra solo retoca algunas atribuciones y cambios menores en el nombre de los departamentos
La fisonomía del Govern que pretende presidir Quim Torra es casi idéntica a la de su sucesor, Carles Puigdemont. El nuevo president se ha encontrado una estructura prácticamente decidida y en donde la paridad brilla por su ausencia. Solo hay tres consejeras entre los 14 cargos. Las consejerías del nuevo Ejecutivo catalán están repartidas a partes iguales entre Junts per Cataluña y Esquerra Republicana. La media de edad de sus miembros es 49,5 años y la consejera portavoz, Elsa Artadi, y el vicepresidente, Pere Aragonès, serán los dos puntales de la gestión.
Solo tres departamentos estarán dirigidos por mujeres. Además de Artadi, de Junts per Catalunya, están Ester Capella, de Justicia, y Teresa Jordà, de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, ambas de ERC. Durante el mandato de Puigdemont hubo cinco consejeras. Las críticas por la falta de paridad llegaron ayer desde el resto de partidos, incluido Esquerra.
La estructura del nuevo Ejecutivo catalán es muy similar a la que tenía el Govern presidido por el expresidente Carles Puigdemont. Los cambios, de hecho, son mínimos. Por ejemplo, el sensible tema de la vivienda vuelve a depender del Departamento de Territorio y Sostenibilidad. Hasta ahora estaba bajo el control de Gobernación. Y esta cartera muda de nombre y pasa a denominarse Políticas Digitales y Administraciones Públicas. Con esto se busca dar relevancia a temas como las políticas de ciberseguridad e identificación electrónica.
Al frente estará Jordi Puigneró (Sant Cugat del Vallès, 1974), el hasta ahora Secretario General de Telecomunicaciones, Ciberseguridad y Sociedad Digital. Su dedicación a los preparativos del referéndum ilegal del pasado 1 de octubre lo puso en el ojo del huracán. Fue citado como investigado por los presuntos delitos de desobediencia, malversación y revelación de secretos.
Otro de los nuevos consejeros también ha tenido que comparecer ante la justicia por el independentismo. La Fiscalía se querelló por desobediencia, malversación y prevaricación por el 1-O contra Miquel Buch (Premià de Mar, 1975), el elegido para liderar el departamento del que dependen los Mossos d'Esquadra. Buch era entonces el presidente de la Asociación Catalana de Municipios (ACM). El TSJC aceptó únicamente el delito de desobediencia que remitió al Supremo[TEX]. También es la cabeza visible del sector crítico del PDeCAT, que quiere acercar al partido a los postulados de Puigdemont y derrocar a la actual dirección.
Los dos pilares del nuevo Govern son Elsa Artadi, que será la portavoz del Ejecutivo catalán y responsable del departamento de Empresa, y Pere Aragonès, el hombre fuerte de los republicanos y que ocupará la vicepresidencia y la cartera económica.
El núcleo duro de Junts per Catalunya también recupera a dos pesos pesados del tri[/TEX]partito formado por socialistas, Esquerra e Iniciativa que gobernó entre 2003 y 2011. El nuevo responsable del área de Acción Exterior es el republicano Ernest Maragall, que ya había estado en el Govern como responsable de Educación. Es el más veterano de los consejeros, con 75 años. Asimismo, 14 años después, Josep Bargalló regresa al Departamento de Enseñanza. Este militante de Esquerra también fue conseller en cap, entre 2004 y 2006, en reemplazo del también republicano Josep Lluís Carod-Rovira.
El Ejecutivo catalán tendrá por primera vez un consejero de origen marroquí: Chakir el Homrani, nacido en Barcelona pero de padres extranjeros. El republicano fue el ponente de la renta garantizada de ciudadanía.
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