La Casa Pich i Pon de la plaza de Catalunya pierde un Hermes

Hermes está considerado el dios olímpico de los viajeros y los comerciantes. Hay centenares de representaciones de este ser mitológico en fachadas de todo Barcelona. Hace unas semanas, un temporal de viento derribó una de las más emblemáticas, la situada en la Casa Pich i Pon, en el número 9 de la plaza de Catalunya.

La casa, obra de Josep Puig i Cadafalch, fue la residencia oficial del empresario Joan Pich i Pon, quien fue alcalde por el Partido Republicano Radical de Alejandro Lerroux entre enero y octubre de 1935. El edificio lo coronan dos templetes y, sobre ellos, dos dioses Hermes.

Las dos figuras desaparecieron durante la Guerra Civil, pero fueron sustituidas en la década de 1980 por dos estatuas hechas con fibra de vidrio por la escultora Susana Solano.

Durante más de 30 años los dos Hermes han presidido el edificio, pero hace unas semanas, según uno de los miembros de la comunidad de vecinos, el temporal de viento se cebó con una de las estatuas y la arrancó dejando solo parte del pie alado sobre una de las cúpulas. “Afortunadamente cayó en el terrado y no a la calle porque podría haber hecho daño a alguien”, explicó la misma persona, quien asegura que la estatua se hizo añicos tras impactar con el suelo.

Tras el desastre aseguraron con cuerdas el Hermes supervivientes y comenzaron a informarse sobre como reponer la pérdida. El Consistorio no tiene por el momento ninguna información sobre si la propiedad quiere reponer la estatua.