Otra Navidad

Cuando se escucha la frase “King of Kings” en los auditorios de todo el planeta por estas fechas es muy difícil contener ese “¡Aleluya, aleluya!” que de la mano soberbia de Händel nos dice que, un año más, vuelve a ser Navidad. Pero igual que en Cuaresma se agradece que haya propuestas más allá de las pasiones y los mil cánones sobre esa arrebatadora forma de plegaria que es el réquiem, y también la recuperación de un repertorio menos conocido para festejar estas fiestas.

La Orquesta de la Comunidad de Madrid (Orcam) acompañada de su coro hermano, el Coro Abierto y los Pequeños Cantores proponen para mañana martes un concierto singular en el Auditorio Nacional que no por ello es menos navideño. Victor Pablo Pérez tomará las riendas de su orquesta para abrir la noche con las hermosas Díez melodías vascas del maestro Jesús Guridi, al que nunca se le hace el caso que merece. Guridi hace aquí con la hermosa música vasca lo que hicieron Falla y Turina con la andaluza: elevarlas hasta el Olimpo de la Música sin renunciar a su maravillosa identidad popular.

Para seguir la noche, nos ofrece la Orcam otra partitura que nos parece ajena a un programa de tintes navideños: Cantique de Jean Racine de Gabriel Fauré. Es una obra de juventud del compositor francés en la que ayudado de un coro mixto establece un diálogo entre las armonías arcaizantes y las maneras del Romanticismo para configurar un himno de alabanza. Para terminar la noche, la Cantata de Navidad de Arthur Honegger. Es esta una obra religiosa construida en un París entregado a las vanguardias más rompedoras, lo que hace más singular aún la pieza. Con un barítono solista y coros adultos e infantiles, Honegger construye un sendero que nos conduce desde la oscuridad a la luz con soltura e ingenio. Un gran programa para una Navidad en la que todo es posible.