Recasens critica que la subdelegación no le dio información de la lucha antiterrorista

El comisionado de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Amadeu Recasens, ha criticado este miércoles por la mañana, en la sesión extraordinaria sobre los atentados de La Rambla, el hermetismo del Estado en materia antiterrorista. Después de recibir un mar de críticas del líder municipal del PP, Alberto Fernández Díaz, Recasens sentenció: “El principal responsable de la seguridad en terrorismo es el Estado. Tardé meses en ser recibido, les presenté una serie de cuestiones y, a día de hoy, todavía espero respuesta”.

Según ha podido saber EL PAÍS, esta reunión se efectuó con el subdelegado del Gobierno Emilio Ablanedo durante el primer semestre del año. En el trascurso del encuentro, el máximo responsable de la seguridad municipal transmitió una serie de preguntas para la protección de la ciudad en materia terrorista. Según comunicó ayer Recasens, nunca recibió respuesta.

Un portavoz de la subdelegación del Gobierno ha admitido esta tarde que la reunión entre Recasens y Ablanedo se había producido. Pese a ello, el portavoz defendió que no era el enclave para hablar de lucha antiterrorista.

El equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Barcelona solicitó la celebración de una comisión extraordinaria tras los atentados. La reunión ha tenido lugar esta mañana.

Recasens ha explicado que tras los atentados de noviembre de 2015 en París se formaron diferentes equipos para abordar una emergencia de este tipo. El comisionado de Seguridad ha realizado un análisis pormenorizado de la actuación que realizaron la Guardia Urbana y los equipos de emergencia. Según Recasens, la furgoneta tardó 41 segundos en atropellar a decenas de personas por La Rambla. El Comisionado ha anunciado que el cuerpo municipal está en trámites para adquirir un vehículo “de unos 200.000 euros” para coordinar grandes emergencias como la del pasado 17 de agosto.

La teniente de alcalde de derechos sociales, Laia Ortiz, también ha resaltado las labores efectuadas desde los servicios de emergencias sociales que por el momento han atendido a “725 personas”. El concejal del PDeCAT, Jaume Ciurana, ha agradecido la labor de los servicios de emergencia y ha pedido al equipo de Gobierno que “trabaje los protocolos” para combatir estas amenazas.

Más crítica ha sido la líder de Ciudadanos, Carina Mejías, que ha defendido una solicitud que efectuó su formación tras los atentados de París en 2015. “Pedimos que se establecieran mecanismos de cooperación entre los cuerpos y que se incrementara la presencia de la policía de proximidad. Se nos tildó de alarmistas e irresponsables”, ha criticado. Mejías ha lanzado una serie de preguntas al comisionado de Seguridad: “¿Eran conscientes de que Barcelona era objetivo, tal y como anunciaron los musulmanes que viven en nuestra ciudad? ¿Qué mecanismos de coordinación ha habido? porque creo que no han funcionado demasiado“. La líder de Ciudadanos ha exigido que se aclare si en diciembre de 2016 el Ministerio del Interior recomendó poner obstáculos (bolardos) en las principales calles de la ciudad.

El portavoz de ERC, Jordi Coronas, ha calificado la respuesta de los cuerpos de seguridad tras el atentado como “impecable”. Coronas ha alertado de los riesgos de la islamofobia pero ha lamentado que "el 70% de los imanes salafistas están en Cataluña. No podemos permitir el discurso del odio y, si tenemos que cerrar algún centro, los haremos como hicimos con la librería Europa”.

El más crítico ha sido el líder del PP, Alberto Fernández Díaz. El popular ha denunciado que Ada Colau no haya comparecido para dar explicaciones. “¿Tenían información alertando de un atentado inminente en Barcelona o La Rambla?”, ha inquirido. Fernández Díaz ha preguntado dónde se colocan “los puntos antiterroristas de la Guardia Urbana” y ha concluido: “Sorprende que por el lugar donde entró la furgoneta asesina haya un vado de más de 15 metros. ¿No hubo ninguna auditoría de seguridad que aconsejara instalar allí algún elemento de protección? Ahora hay una furgoneta que funciona a modo de 'furgobolardo'. ¿Nadie pidió al Ayuntamiento medidas de protección?”

Una serie de preguntas que Recasens zanjó asegurando que la Guardia Urbana no tiene competencias en antiterrorismo y que la delegado del Gobierno todavía no ha respondido a la mayoría de las solicitudes en esta materia.

Maria Rovira, de la CUP, ha criticado las políticas del PP. “Nuestro enemigo está en los despachos, en cada contrato de compraventa de armas, en cada frontera, en cada CIE, en cada comisaría…”, ha asegurado. Rovira ha responsabilizado, dirigiéndose al líder municipal del PP, de estos atentados a los protagonistas de la fotografía de las Azores.