El fiscal pide cinco años y medio a un joven por ocho incendios en dos días
El presunto pirómano, de 29 años, tendrá que indemnizar el coste de los daños y medios empleados para sofocar los fuegos
Los ocho fuegos que se desataron casi simultáneamente y en dos días sucesivos en varias localidades del partido judicial de Celanova, Ourense, en junio de 2016, algunos próximos a a las casas, fueron provocados deliberadamente con un mechero por un vecino de una de las parroquias afectadas, S.B.L., de 29 años, según el Ministerio Fiscal.
El acusado será juzgado este lunes en la sección segunda de la Audiencia de Ourense y se enfrenta a una condena de cinco años y seis meses de prisión y al pago de una indemnización por los daños provocados por el fuego en el mobiliario público al que, en alguno de los casos, llegó a alcanzar el fuego, además de los costes derivados de la intervención de los servicios de extinción de incendios de la Xunta de Galicia.
El fiscal le acusa de un delito continuado de incendio forestal y cree que el presunto pirómano actuó prevaliéndose de las altas temperaturas que se registraron en esta zona de la provincia de Ourense, entre el 8 y 9 de junio, y con fuertes rachas de viento, lo que facilitó su propagación.
Según la fiscalía, el acusado provocó cuatro incendios el 8 de junio, entre las 21 horas y las 22,45. Para ello se desplazó en moto y prendió los fuegos con un mechero. A media noche del día siguiente salió en su coche y hasta pasadas las seis de la tarde encadenó los otros cuatro incendios restantes.
Tras la detención del acusado y la puesta a disposición del titular del juzgado de instrucción número uno de Celanova que llevó el caso, este acordó en un auto el 17 de junio su ingresó en el centro penitenciario de Pereiro de Aguiar. Su decisión que fue ratificada cuatro meses después, por lo que el imputado sigue actualmente privado de libertad en el mismo penal a la espera de juicio.
También la Fiscalía de Ourense había solicitado la prórroga de la prisión provisional del detenido en el caso de que transcurrieran dos años desde la apertura del procedimiento penal sin que se hubiera dictado sentencia por un tribunal.
El informe forense señala que el acusado padece un trastorno mixto de la personalidad aunque concluye que este no afecta a su capacidad de comprensión, pero, en todo caso, sí a la capacidad de actuación de modo leve, expone la fiscal Carmen Euró Bouza en su escrito de acusación.
Además de una multa de 3.780 euros y las costas del juicio, el acusado tendrá que abonar 7.273 euros a la Xunta por la intervención que los servicios contra incendios tuvieron que realizar en los ayuntamientos de Cartelle y A Merca, en la urbanización de A Manchica y en la Mancomunidad Terra de Celanova.
En la relación de daños materiales causados por el presunto pirómano aparecen varias fincas de propiedad privada, diversos colectores municipales, una farola del alumbrado público y plaquetas de las aceras. Los afectados renunciaron a presentar reclamaciones económicas a titulo particular en este proceso, no así las administraciones públicas de las que responderá la Xunta.
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