Los conflictos del sur del Mediterráneo alimentan la mitad del ‘boom’ turístico

El turismo internacional está siendo un motor de la recuperación económica catalana. Y en particular en la provincia de Barcelona, que vive su particular boom con un incremento de las pernotaciones de más del 21%, de 24 a 29,1 millones entre 2010 y 2016, según el Instituto Nacional de Estadística. El nuevo récord que encara el sector este año explica parte del bueno ritmo de la economía. Sin embargo, la mitad del aumento de turistas extranjeros de los últimos años se debe a los conflictos que viven otras destinaciones competidoras, en especial del Mediterráneo, según un informe de BBVA Research.

La economía catalana sigue tirando. Y a tenor de los servicios de estudios, este año seguirá creciendo a buen ritmo. El informe Situació Catalunya, que presentó ayer BBVA, apunta a que el Producto Interior Bruto (PIB) de la comunidad avanzará este año de forma similar a 2016, cuando se expandió el 3,5%. Para este año, BBVA prevé un crecimiento del 3,3%, y para el que viene, del 2,8%. Esa buena marcha, según el informe, se debe a los “vientos de cola” que impulsan la economía: los tipos de interés bajos, el aumento del crédito o los precios del petróleo. Pero el economista jefe para España de BBVA Research, Miguel Cardoso, atribuyó la mejora de las perspectivas sobre todo al sector exterior: las exportaciones y el turismo.

Cataluña sigue batiendo récords de turismo. Sin embargo, Cardoso advirtió de que parte de ese boom se debe a que muchos de esos viajeros se han “redirigido” hacia la comunidad a causa de las “tensiones geopolíticas” y la “percepción de inseguridad” en países competidores. Y ello ha permitido incrementar tanto las pernoctaciones como los precios, que el año pasado subieron el 3,2%. Ese turismo “prestado” llega al 50% del crecimiento de pernoctaciones acumulado entre enero de 2010 y junio de 2016 en la provincia de Barcelona y del 15% en la de Tarragona.

Inversiones necesarias

Cataluña no es la única comunidad que vive ese fenómeno. BBVA Research calcula que en el caso de Las Palmas y Cádiz esa proporción es de casi el 70%, mientras que en Baleares es superior al 60%. Cardoso explicó que ese efecto de desplazamiento “cada vez tendrá un impacto menos positivo” y avisó de que habrá un momento en el que se corregirán los factores que “redirigen turistas a Cataluña”, lo cual supondrá una barrera al crecimiento. Por ello, el economista jefe de BBVA Research instó al sector hotelero a realizar las inversiones necesarias para “fidelizar” a los turistas y que sigan viajando a Cataluña “en un entorno de cambio de las condiciones” en el que “se reviertan parte de esos flujos”.

Los hoteleros creen que una de las mejores formas de fidelizar es mediante la promoción. Ayer la Confederación Empresarial de Hostelería y Restauración de Cataluña (ConfeCat) emitió un comunicado recordando que la ley fija que el fondo que nutre la tasa turística debe destinarse a la promoción y mejora de la industria. La advertencia de los hoteleros llega una semana después de que el Ayuntamiento de Barcelona decidiera limitar a 4,5 millones de euros la cantidad procedente de la tasa que destinaría al consorcio Turismo de Barcelona. La entidad afirmó que la participación de los municipios en el tributo “genera dudas” en el sector respecto al “destino de los recursos”.