Aparecen facturas sin pagar por valor de 1,5 millones de euros en el Ayuntamiento de Navalcarnero

Multitud de facturas sin abonar del Canal de Isabel II por un valor aproximado de 1,5 millones de euros han aparecido en el Ayuntamiento de Navalcarnero. Los documentos fueron encontrados en varios palés que estaban almacenados en el sótano del Consistorio del municipio, según el concejal de Hacienda, Juan Santos Benito. Benito ha asegurado que optó por investigar los palés ante la enorme lentitud del Canal en enviarle las facturas que les solicitó.

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El concejal explicó que las facturas pertenecen a los años en los que gobernaba el Partido Popular (PP). Además, añade que los documentos demuestran que ha habido un "falseamiento de la contabilidad", porque el gasto medio anual de agua en el Ayuntamiento es de 400.000 euros y hay facturas que reflejan que, en ocasiones, la liquidación fue de 70 euros (en 2008), e incluso de cero euros (en 2010).

"Se trata de un falseamiento absoluto de la contabilidad. No lo digo yo, sino la Cámara de cuentas", señaló Benito. A su vez, el concejal recordó que el Consistorio de Navalcarnero se incorporó como accionista del Canal en 2012. Según él, esto implica que hay una serie de dividendos anuales que deberían haberse ingresado en las arcas municipales por un total de 495.863,12 euros.

Ante esta situación, el Canal de Isabel II comenzó a notificar al Ayuntamiento compensaciones de oficio por esos 495.863,12 de euros que debían ingresar en las arcas municipales por los dividendos de las acciones suscritas con el Canal. Por su parte, el Consistorio giraba notificación denegando la compensación con aquellas facturas porque no estaban contabilizadas mientras el anterior gobierno popular proponía otras facturas para su compensación con esos dividendos.

La Concejalía de Hacienda decidió contactar con el Canal después de analizar las compensaciones porque aparecían muchas facturas que habían sido abonadas por el Ministerio con cargo a los mecanismos de pago a proveedores. Por esto, Hacienda entendió que las facturas no podían formar parte del pago y de la compensación a la vez, porque si no se incurriría en duplicidad de pago.