Moliner no optará a la reelección como presidente del PP de Castellón

El presidente del PP de Castellón y de la Diputación, Javier Moliner, ha anunciado esta mañana que no optará a la reelección para presidir el PP en el congreso provincial del próximo 3 de junio. La decisión, “exclusivamente personal”, llega tras cuatro años y medio como líder de los populares en la provincia y con el “convencimiento” de haber consolidado en este tiempo la transición hacia un partido “cohesionado, fuerte, ejemplar, moderno y transparente”, “sin problemas por delante” e “inflexible” en la lucha contra la corrupción.

Moliner ha explicado que esta decisión es necesaria para mantener la coherencia con la actitud que ha defendido todo este tiempo a favor de la regeneración política. “Desde la convicción de que la política es un compromiso, no una profesión, creo que es muy bueno para la democracia, y sano para la política, asumir este tipo de decisiones sin miedo”, ha dicho.

Decisión que ha trasladado ya esta misma mañana al comité de dirección del PPCS, aunque antes lo comunicó al presidente nacional, Mariano Rajoy, a la líder del PP regional, Isabel Bonig quienes, ha reconocido, le instaron “a que me lo repensara” aunque finalmente han “entendido” la postura.

En la rueda de prensa convocada para hacer público su anuncio, ha defendido la necesidad de regeneración en los partidos políticos como bases del sistema democrático. “Es bueno que los políticos sepamos tomar la decisión de apartarnos de los cargos de dirección de los partidos y ceder el paso a nuevas ideas, nuevas visiones y nuevas personas”, ha mantenido Moliner. “Nunca he querido profesionalizarme en la política y entiendo que quien pide regeneración debe ser el primero en aplicársela a él mismo”.

Moliner ha sido cauto tanto en su apuesta de nombres para relevarle en el cargo como en lo relativo a su futuro político. El reto más inmediato, eso sí, es “gestionar y gobernar” la Diputación, que es, ha dicho, “lo que me preocupa y ocupa”.

Sobre lo primero, ha indicado que es hora “de que los militantes hablen” y “elijan”. Sí ha reconocido que en la directiva del partido andan “en el espacio de la sorpresa” tras haberse enterado esta misma mañana de la noticia y que por ello ninguno ha planteado todavía su voluntad de presentarse a la candidatura para liderar el partido provincial. También ha destacado que el PPCS cuenta con un equipo “fantástico” y con gente “muy capacitada”.

Esta misma tarde, según ha avanzado, la carrera por la sucesión pondrá el contador a cero, con la convocatoria, por parte de la junta directiva del PPCS del congreso provincial, “y vamos a ponernos a trabajar para que aquellas personas que lo consideren puedan presentarse a la elección y que todos los militantes puedan elegir al nuevo presidente del PP provincial”, ha matizado.

Sobre su futuro político, no ha confirmado si repetirá como presidente de la Diputación –“hoy es tiempo del partido”- o si optará a otros puestos de responsabilidad dentro del PP, nacional o regional. Aunque sí ha dicho que no es su voluntad en este momento, “porque cuando uno busca otros puestos, no toma la decisión de irse”.

Moliner fue elegido presidente del PP provincial el 14 de julio de 2012, con el 97,63% de los votos. Sucedía en el cargo a Carlos Fabra –condenado a cuatro años de cárcel por fraude fiscal-, a quien definió el mismo día de su elección como nuevo líder del partido como el “verdadero motor de este proyecto” y “un líder que con su fuerza y compromiso nos ha llevado al éxito y a estar siempre unidos". También en esa jornada reconoció que dentro del PP existían “diferencias”, aunque cuatro años y medio después, con las relaciones con su predecesor completamente rotas, se vanagloria de haber construido un partido “cohesionado” y “fuerte”. Por ello, ha dicho, no teme que su marcha debilite a los populares castellonenses o provoque tensiones internas.

“El PP de Castellón camina con el viento a favor y hacia unos mejores resultados” en las elecciones de 2019. Estos, los comicios locales de dentro de dos años son, ha insistido, el reto más inmediato para el partido.