Podemos impide que la Asamblea condene el ataque de la CUP a la sede del PP
La iniciativa, presentada por los populares, fue aceptada por el resto de formaciones políticas
El grupo parlamentario de Podemos en la Asamblea de Madrid ha impedido llevar al Pleno una declaración institucional de condena del ataque a la sede del Partido Popular de Cataluña, propuesta por el PP. El acto fue protagonizado por una organización juvenil de la izquierda anticapitalista, afín a la CUP, el pasado 27 de marzo en Barcelona. Fuentes de Podemos aseguran que "no se ha planteado con el suficiente tiempo para ser debatida con profundidad". Al no contar con el apoyo de los diputados de la formación morada, la declaración no ha salido adelante porque se precisa el apoyo de todos los grupos parlamentarios. Desde el PP dicen que se siguió el procedimiento habitual que implica el envío de la propuesta a todos los grupos políticos y que tanto PSOE como Ciudadanos respondieron.
El texto pretendía que se rechazara" firmemente la ofensa y la ocupación llevadas a cabo por el grupo político Arran". Asimismo, añadía que "el respeto a todas las formaciones políticas democráticas está en la base del sistema institucional español". Por lo tanto, la discrepancia ideológica "es legítima y es garantía del pluralismo, pero no puede ser nunca una razón para justificar la intimidación y la violencia".
El pasado 27 de marzo, unos 50 militantes de Arran, las juventudes de la CUP, intentaron asaltar la sede del PP en Barcelona para reclamar la inmediata celebración de un referéndum de independencia. La acción vandálica contó con la presencia de la portavoz de los anticapitalistas en el Parlament, Anna Gabriel, y de su antecesor, David Fernándes. Los servicios de seguridad impidieron el asalto, pero la fachada del edificio quedó empapelada con carteles y adhesivos.
El pleno del Ayuntamiento de Madrid aprobó, el pasado 30 de marzo, una declaración de condena al mismo ataque. Sin embargo, minutos antes de la votación, ocho concejales de Ahora Madrid, confluencia liderada por la alcaldesa Manuela Carmena, se levantaron y abandonaron el pleno para evitar pronunciarse. La iniciativa salió adelante con el apoyo del resto de ediles de Ahora Madrid, la alcaldesa incluida, y del resto de formaciones políticas.
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