25 años de discurso alternativo al ‘modelo Barcelona’
La revista de la FAVB, ‘Carrer’, celebra dos décadas y media de mirada crítica a la ciudad y dando voz a los barrios, con más reconocimiento de las entidades que del periodismo
A finales de 1992, en plena resaca de la borrachera olímpica, pusieron el dedo a la llaga con un monográfico osado y crítico sobre el legado de la Barcelona de [el alcalde Pasqual] Maragall. La revista de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB), La veu del Carrer, tenía un año, pero ya apuntaba maneras planteando una mirada alternativa al discurso imperante. Abría, antes de que nadie, un melón: el de la no siempre positiva herencia de los Juegos. “La ciudad estaba en éxtasis después y había desaparecido el espíritu crítico”. Habla Andrés Naya, el alma de la revista. Quién ha estado en primera línea como codirector desde el primer número, en 1991, hasta el 143, un monográfico sobre el futuro de la ciudad que se presenta esta tarde en Can Batlló.
Cuestionar el legado de Maragall ha sido solo una de las llagas donde han puesto el dedo y uno de los alcaldes a quienes han criticado. Carrer también ha sido un dolor de cabeza, en algún momento, para Joan Clos (el Forum), Jordi Hereu (la Diagonal) o Xavier Trias (la pobreza que ha fracturado la ciudad). Naya pasaría horas explicando anécdotas de enganchadas con personalidades y presiones del poder de turno. El reto ahora es mantener la crítica con la alcaldesa Ada Colau, que viene de la calle, de los movimientos y las asociaciones de vecinos. “Sí que es de los nuestros, entre comillas, pero lo es. Con este ayuntamiento nos identificamos en valores y objetivos, pero todo va muy lento”, dice Naya, que admite que tienen el reto de “mantener el sentido crítico”.
Hasta ahora, evoca, “ha habido épocas en las que los políticos nos han servido los sumarios en bandeja”. En Carrer denunciaron la lentitud de las administraciones al resolver la aluminosis mientras a una invertían en Liceu después del incendio; calificaron de “estafa” el Plan de Hoteles de los noventa; titularon “Núñez, faraón” en una portada sobre el promotor y ex presidente del Barça; criticaron antes de que nadie el Fòrum 2004... Y recurrentemente han alertado del drama del acceso a la vivienda en la ciudad, los estragos de la heroína o la pobreza que trincha siempre los mismos barrios. En paralelo, han hecho portadas con temas de actualidad (okupas, el derrumbe del Carmel, manifestaciones en Barcelona). Y han abierto debates sosegados: hacerse viejo en la ciudad, la movilidad, el modelo de centros cívicos, los retos que plantea la inmigración, el papel de la iglesia, los niños o las mujeres...
Una escuela de periodistas
Hay coincidencia en que Carrerha sido una escuela de periodismo. "Un lugar de encuentro para docenas de periodistas jóvenes que han practicado el periodismo básico, el que se hace a pie de calle, el que tiene que ver con la vida cotidiana y con los problemas reales y cercanos", resume el periodista Eugeni Madueño, que también estuvo muy vinculado a la revista.
Lo curioso es que su alma y codirector, Andrés Naya, no es periodista. O sí. “Periodista sin carné”, atina Madueño. Naya admite que es “un loco de la información” y que la redacción ha sido “un desbarajuste” con una sólida estructura donde el presidente de la FAVB lee los editoriales y dos codirectores capitanean el consejo de redacción —“un grupo de periodistas artesanos”— y el que forman los asesores. En 25 años, un millar de personas, presume. Además de los colaboradores, solo hay una persona a sueldo: ejerce de redactor jefe y maqueta. Desde hace unos años es Elia Herranz.
Carrer relevó al boletín interno que tenía la FAVB. “Queríamos hacer una revista que hablara de temas de ciudad, que abriera interrogantes y tuviera sentido crítico”, recuerda Naya. Y lo han conseguido gracias a los ingredientes que hacen única la publicación: los temas los propone gente que toca la calle, sean redactores o activistas de las asociaciones; los escriben tanto periodistas jóvenes como veteranos; y cuenta con la participación de reconocidas voces de la arquitectura, el urbanismo, la economía o la historia. Las portadas, sean fotos o ilustraciones, y la cuidada edición gráfica y las viñetas son también marca de la casa; como el Cuarto fosc, la sección adonde van los patinazos de las fuerzas vivas de la ciudad.
El año 1991, el periodista Ernest Alòs, hoy jefe de la sección de Libros de El Periódico fue el primer codirector de Carrer, junto con Naya. “Teníamos en mente una publicación que no se limitara a ser un boletín de las asociaciones y sus actividades, sino una revista sobre la ciudad, apostando por los profesionales, aunque también hubiera páginas de información interna”, dice Alòs. Y apunta que “tener el paraguas de la FAVB le ha dado una continuidad institucional que otras publicaciones no han tenido”. Alòs también celebra el número de la Barcelona del 92: “Fue muy atrevido, fuimos los aguafiestas del 92, pero también pioneros y precoces en la crítica que se ha acabado haciendo del modelo Barcelona”. O destapando problemas “que han acabado en el radar de los medios”.
El también codirector de Carrer, el periodista y ahora consejero de distrito de Sant Martí, Marc Andreu, señala que es una publicación “muy reconocida en el ámbito vecinal y profesional, pero poco reconocida y conocida en el ámbito periodístico”. Y apunta como clave que la crítica se hace “más allá del gobierno local de turno, sustentada en el conocimiento real de lo que pasa, en un microclima muy parecido al de las redacciones de antes, cuando la información local era central”.
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