Barcelona quiere que El Prat tenga conexión con Tokio, Seúl y Shanghái
El Consistorio pone en marcha China Desk, un servicio municipal para ayudar a inversiones chinos
El segundo teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha anunciado este lunes que el Consistorio, a través del comité para el desarrollo de rutas aéreas participado por el Ayuntamiento junto con la Cámara de Comercio, la Generalitat y AENA, pretende mejorar la conectividad del aeropuerto de Barcelona-El Prat con el resto del mundo. Collboni ha asegurado que el objetivo es conseguir conexiones aéreas directas con Tokio (Japón), Seúl (Corea del Sur), Buenos Aires (Argentina), Shanghái (China), Los Ángeles (EUA), San Francisco (EUA), Bangkok (Tailandia), Hong Kong (China), Ciudad de México (México), Boston (EUA), Delhi (India), Chicago (EUA) y Santiago de Chile (Chile).
“En septiembre de 2017 acogeremos el World Route, el encuentro mundial más importante del sector de las líneas aéreas, aeropuertos internacionales y agencias de promoción territorial. Lo aprovecharemos para posicionar a Barcelona e intentar conseguir rutas", ha explicado Collboni. Aún así, muchas de las rutas a las que aspiraba conseguir esta mañana el Consistorio llevan meses anunciadas: Norwegian comenzará en junio ha realizar vuelos directos entre Barcelona y Los Ángeles y entre la capital catalana y Sant Francisco. Antes, en mayo Air China, conectará con Shanghái. La compañía Korean Air enlazará en vuelo directo, a partir de abril, Seúull con Barcelona y Cathay Pacific ya anunció que en junio conectará cuatro veces por semana Barcelona con Hong Kong.
El encuentro no es la única medida que baraja el Consistorio para atraer capital extranjero. Barcelona pretende seducir a capitales de zonas afectadas por un clima de “incerteza” y se marca como objetivo aquellas empresas afectadas por el Brexit y por la incertidumbre de mercados que ha provocado el ascenso al poder de Donald Trump en Estados Unidos. La capital catalana también tiene en el punto de mira en China y pondrá en marcha un servicio municipal bautizado como China Desk con el que pretende ayudar a los inversores y empresarios chinos que quieran hacer negocios o invertir en la ciudad.
El Consistorio “invertirá siete millones de euros en promocionar las relaciones económicas con el exterior para generar ocupación estable y de calidad”, ha destacado Collboni. El segundo teniente de alcalde ha admitido que no sólo debe promocionarse la ciudad sino todo el área metropolitana y ha pedido la actuación conjunta no solo del Consistorio, sino también de la Fira de Barcelona y el Consorcio de la Zona Franca.
“Tenemos la misión de recuperar el control de la marca Barcelona”, ha destacado. Collboni ha admitido que los barceloneses son los únicos que pueden gestionarla y decidir como se muestra al mundo. “No puede ser que cualquiera pueda hacer casi cualquier cosa con la marca. Ahora mismo no hay política de branding y todas las grandes ciudades la tienen. Aún así, hay una parte de la marca que se encuentra judicializada”, ha resaltado. “Un claro ejemplo de marca es la de Londres y nosotros queremos algo parecido, intensificar la proyección internacional de la ciudad y su proyección cultural”.
El Consistorio pretende también la creación de un Consejo Asesor de Promoción de la Ciudad integrado por expertos del ámbito empresarial, académico y de investigación para “sumar esfuerzos y posicionar Barcelona como una ciudad atractiva para la actividad económica”. También se creará el International House, un servicio para atraer talento internacional que les apoye en la obtención de permisos y servicios para establecerse, entre otros. “Tenemos que ser la ciudad número uno en startups y el Mobile World Congress es un gran aliado”, ha concluido.
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