Mujeres en movimiento

Han pasado 40 años y, sin embargo, algunas de las conclusiones reivindicativas de las I Jornades Catalanes de la Dona, que se celebraron en mayo de 1976 en el paraninfo de la Universidad de Barcelona, están completamente vigentes: derecho a un lugar de trabajo sin discriminaciones en la formación profesional o la remuneración, abolición de la discriminación en el trabajo por razón de sexo… Afortunadamente, otras sí se han superado, como el servicio social de la Sección Femenina o la Ley de Peligrosidad social; y otras demandas se han conseguido, como la ley del divorcio, los anticonceptivos y la legalización del aborto, aunque con limitaciones.

“No pocas de las reivindicaciones de hace 40 años siguen vigentes y tienen todavía mucho recorrido, especialmente todo lo relativo a la violencia que sufren las mujeres y las discriminaciones salariales. Probablemente por eso el movimiento feminista se ha reactivado en los últimos tiempos en Barcelona”, explica Cristina Borderías, doctora en Historia Moderna y Contemporánea de la Universidad de Barcelona y comisaria del proyecto En moviment (s) Dones de Barcelona 1976-2016. Una iniciativa del Comisionado de Memoria Histórica del consistorio “algo que no me deja de parecer extraordinario porque habitualmente las actividades referentes a la memoria histórica suelen girar en torno a guerras y es muy singular que se quiera recordar el legado feminista”.

El proyecto está a caballo entre una exposición y un cinefórum, porque también se proyectarán películas sobre el movimiento feminista y el documental El despertar de les dones: la lluita feminista, realizado por TV3 dentro de la serie Dies de Transició hace algo más de una década. Un documental en el que aparecen algunas de las mujeres que estuvieron en aquellas jornadas de 1976 y que también participan en los seminarios del proyecto, como la abogada Magda Oranich, la editora Mireia Bofill o la fotógrafa Pilar Aymerich. Y que recuerda con anuncios publicitarios de televisión, en plena época franquista, el rol de la mujer como el del spot del Brandy Byass 96 en el que una mujer, sumisa, ofrecía una copa a su marido: “es mi guerrero”.

El proyecto de Borderías persigue recuperar la memoria de lo que supusieron las reivindicaciones feministas de aquellos años. Y más concretamente, aquellas jornadas, a las que asistieron 4.000 mujeres —había algún hombre que se situaba al final del paraninfo discretamente— y que sirvieron como lugar de encuentro con otras mujeres con un activismo más a pie de calle: en los barrios, en los sindicatos, en las fábricas.

“Surgió un movimiento muy diverso, no solo era de universitarias o pequeño burguesas, que es como se calificó al feminismo en los primeros años de la Transición”, recuerda. En efecto, allí se discutió y se habló de todo: desde la sexualidad y los anticonceptivos, pasando por las reivindicaciones de transporte en los barrios, las escuelas, las guarderías…. “Y siempre pensando que entraría la policía en cualquier momento”, explica Aymerich en el documental. Con cierta lógica porque aquellas jornadas se realizaron antes de que se legalizase la actividad de los partidos políticos y era completamente extraordinario que 4.000 mujeres se reunieran en la Universidad.

En moviment (s) dones de Barcelona tiene un carácter reivindicativo del papel de la mujer en la transformación de la sociedad y su peso en la construcción de la democracia. En el caso de Barcelona, por ejemplo, fueron las mujeres las que se organizaron en los barrios para exigir que se asfaltaran las calles, o que llegara la luz o el agua. “Aquellas movilizaciones fueron el germen de las asociaciones de vecinos y de las vocalías de mujeres”, explica un pequeño libro que se ha editado con el proyecto. En la capital catalana las primeras asociaciones de mujeres se crearon en la década de los sesenta y a impulso de las que militaban o simpatizaban en el PSUC se organizó la Asamblea Democràtica de Dones de Sant Medir en 1965.

La muestra será itinerante por los distritos de la ciudad desde enero y en todos ellos están programadas charlas y encuentros con algunas de las mujeres que participaron en aquella histórica reunión de hace 40 años para abordar el pasado, la memoria, pero también los retos actuales.