La Comunidad de Madrid da el visto bueno al proyecto de La Peineta
El Atlético podrá adquirir el estadio tras el cambio de titularidad aprobado por el Ejecutivo regional
El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha aprobado hoy, en una reunión extraordinaria, el cambio de titularidad del estadio de La Peineta, en el barrio madrileño de San Blas, que pasará de ser un espacio deportivo público a uno privado. De ese modo, se cumplen los trámites para que el Atlético de Madrid pueda comprar el estadio para mudarse allí a partir de la próxima temporada. Se termina así con la incertidumbre generada en las últimas semanas después de que el Ayuntamiento de Madrid se viera obligado a subsanar de urgencia fallos detectados en el proyecto por la Comunidad. La presidenta madrileña, Cristina Cifuentes (PP), ha acusado al Consistorio de Manuela Carmena (Ahora Madrid) de ser el causante, por su actitud "negligente", de los "retrasos" que ha acabado en "una situación esperpéntica".
Después de un año y medio a la espera de su tramitación, el expediente para cambiar la titularidad de La Peineta —trámite imprescindible para sacar adelante el proyecto del Atlético de Madrid de trasladarse la próxima temporada al estadio olímpico— se ha resuelto a toda prisa y en el último momento. Si la cesión de terrenos no se completaba antes del 31 de diciembre, el club rojiblanco podía exigir 200 millones de indemnización al Consistorio, por incumplimiento del convenio firmado entre ambos, y además hubiera hecho muy difícil tener listo el nuevo estadio Wanda Metropolitano para el arranque de la próxima temporada de la Liga.
Justo antes de la aprobación por parte del Gobierno regional (mañana se publicará el acuerdo en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid), Cristina Cifuentes se ha quejado amargamente de las dilaciones del Consistorio, que en lugar de los cuatro meses previstos inicialmente para entregar el expediente de la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana que permitía el cambio de La Peineta, ha tardado un año y medio y lo ha entregado "con errores", lo cual ha obligado a la Comunidad a estudiarlo y aprobarlo definitivamente, como es preceptivo, en unos pocos días.
La sucesión de acontecimientos ha sido la siguiente: el Consistorio entregó su documentación el 2 de diciembre; el 21, los técnicos de la Comunidad, que habían hallado errores en el expediente, se lo devolvieron para que los subsanara; el equipo de Carmena los arregló y un pleno extraordinario aprobó los cambios el día 23. Con el expediente de vuelta en manos del Ejecutivo regional el martes 27, hoy le han dado el visto bueno los técnicos en la Comisión de Urbanismo en una reunión celebrada a las 13.20 horas y, después, el Consejo de Gobierno lo ha aprobado definitivamente en una reunión extraordinaria a las 14.00.
El Ayuntamiento de Madrid se ha defendido de todas estas acusaciones asegurando que os errores detectados eran solo "errores de transcripción" que la Comunidad hubiera podido resolver sin necesidad de devolver los documentos. El concejal de Urbanismo, José Manuel Calvo, dijo que la Comunidad había hecho una "chapuza" con la única intención de poner "palos en las ruedas". Sobre la dilación de año y medio en la tramitación, aseguró que las negociaciones con la Comunidad demoraron la entrega.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.