Herramientas y estrategias para mejorar el mundo laboral

Cerramos agosto en Cataluña con 4.424 personas más al contingente de las que no tienen trabajo, y que suman la escalofriante cifra de 445.440. El mercado de trabajo, además de endurecer el acceso y de reducir el tiempo de los contratos, no responde al mismo ritmo que el crecimiento económico y si añadimos los conceptos de estacionalidad y temporalidad podemos afirmar que tenemos un entorno laboral enfermo.

Desde el Servicio Público de Ocupación de Cataluña (SOC) trabajamos para combatir decididamente la injusticia social que representan estas cifras, indecentes, de personas sin trabajo, con una batería de medidas para favorecer su inserción laboral.

Estas 4.424 personas que acaban de quedar en paro y todas las que lo están desde hace tiempo no tienen que perder la esperanza de recuperar el trabajo. Las Oficinas de Trabajo, repartidas por todo el territorio son, junto con los servicios de ocupación municipales, la puerta de entrada de las personas que buscan trabajo. Ofrecen una orientación hacia los diferentes servicios que prestan las entidades del sistema de ocupación de Cataluña que, con el máximo compromiso y profesionalidad, los ayudan a mejorar su empleabilidad y a encontrar un trabajo digno.

Es así como ahora desde el SOC estamos trabajando en la construcción de proyectos de futuro para las personas. Por ejemplo, se han puesto a disposición de las entidades locales y sin ánimo de lucro la posibilidad de contratar 2.500 jóvenes recién titulados y darles su primera oportunidad, es decir, su primera experiencia en un trabajo afín a su formación. Asimismo, se han conseguido 12.000 contratos laborales con los jóvenes inscritos en el programa de Garantía Juvenil.

Para las personas que llevan más tiempo en paro, algunas de ellas perceptoras de la Renta Mínima de Inserción, mayores de 45 años y sin ningún ingreso, el SOC destinará 35 millones de euros para que los ayuntamientos y consejos comarcales las contraten. Para estas personas que hace tiempo que están fuera del mercado laboral, esta oportunidad supone restaurar competencias laborales, cotizar en la Seguridad Social y adquirir mejores condiciones para después encontrar otro trabajo, cobrando un salario digno. En este último ejemplo, destinaremos más presupuesto porque las personas de más de 55 años firmen contratos de un año de duración y así ampliar el tiempo de cotización de cara a su futura y próxima jubilación. Este colectivo es muy diverso y cada persona merece y requiere una solución a medida y, sobre todo, un buen acompañamiento. El SOC está diseñando un programa que permitirá este trabajo individualizado y a la vez contará con el compromiso y la colaboración de empresas con necesidad de contratación y que valoran especialmente la experiencia e implicación de estas personas a la hora de trabajar.

Hoy mismo firmamos un acuerdo con sindicatos y entidades municipalistas que permitirá cobrar 1.000 euros mensuales a las personas en paro participantes del programa Trabajo y Formación del SOC, un paso adelante para incentivar la contratación de las personas que han sido especialmente castigadas por la crisis, y para avanzar hacia un nuevo salario mínimo catalán.

Desde el Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias trabajamos para todas las personas, jóvenes y no tan jóvenes, para que el paro no sea crónico, y por este motivo pondremos en marcha el programa 30 Plus, destinado a la franja de 30 a 45 años, que trabajará en paralelo la captación de ofertas de trabajo y la preparación o “puesta a punto” de personas para ocupar estos lugares.

Todo esto teniendo en cuenta que la mayoría de nuevas colocaciones se producen en el propio entorno geográfico y relacional. Así pues, cuando desde un territorio se hace una buena diagnosis, se identifican sus potenciales y se conoce a fondo su mapa económico y social, los recursos públicos ganan en eficiencia y en resultados. Es por ello que desde el Departamento hacemos una apuesta decidida por el territorio y este año destinamos cerca de 45 millones de euros en la concertación territorial.

El trabajo es, no nos cansamos de repetirlo, una medida social por excelencia y el trabajo, la actividad de las personas que producen bienes o servicios, dignifica el país. El Gobierno de Cataluña no tiene las competencias para legislar en materia laboral. ¡Lástima! Nuestra gente se merece y necesita medidas preventivas para no perder el trabajo y normas que garanticen unas condiciones de trabajo dignas.

A pesar de todo, no dejaremos de trabajar para la mejora constante, puesto que mientras tanto construimos, también, las bases del empleo de la futura República catalana.

Dolors Bassa i Coll es consejera de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias.