La película que me marcó

Yo eligo El gran Lebowski. Admiro los guiones y el pulso narrativo de Los Coen, su mirada siempre intencionada ante lo humano, su retrato de la estupidez, del cierto absurdo existencial, de la cultura americana. Valoro mucho a los cineastas que no retratan la realidad tal cual es, sino que la miran por encima del hombro con fina ironía para transformarla en ficción. Me encanta todo en El gran Lebowski: la suma de acontecimientos que se enredan en fluida espiral, las risas histéricas de Julianne Moore al teléfono, la genialidad de Turturro y Bridges, la lisergia, la bolera... ¡Qué gran show esta peli! 

(El gran Lebowski. 27 de agosto a las 22.00)

Me quedo con Tiburón. Creo que siempre es un lujo ver esta película en pantalla grande. Para mí, es cine en estado puro. Siempre recordaré esta película porque fue una de las primeras que vi en el cine y que más emociones me causó. La vives como si estuvieras en esa playa.Todo el mundo recuerda algún fotograma de este filme.Es Spielberg en estado puro. Y la música y la interpretación de Roy Scheiner...¡Me encanta!

(Tiburón. 4 de agosto a las 22.00)

El apartamento es la mejor película de la historia del cine y la película de mi vida. Tendría unos 17 años cuando la vi, así que lleva acompañándome más de 50 años, porque cada año la veo al menos dos veces. Siento que Jack Lemon y Shirley Mcclaine son como mis primos, desde aquella película he seguido sus carreras al detalle. Es todo perfecto, de Billy Wilder ni hablamos, qué puedo decir. Esa manera que tiene de introducirnos en un gran edificio de oficinas masificado y poco a poco nos lleva hasta la historia de esos dos grandes perdedores... Adoro las películas sobre perdedores. Cre qoe sería obligatorio que se viera este filme en Nochevieja en todas las casas.

(El apartamento. 30 de agosto a las 22.00)

Los cuatrocientos golpes de Francois Truffaut es algo más que una película. Es una de las obras absolutas del séptimo arte. El inicio de la Nouvelle Vague, una corriente cinematográfica diferente, innovadora y en cierta manera transgresora que busca la esencia del cine: contenido y veracidad. La primera película de Francois Truffaut habla de sí mismo, de su infancia, su adolescencia y de la búsqueda de identidad y del lugar que le corresponde. En consecuencia, una película que habla de nosotros mismos y de nuestra propia infancia. Una historia sin impostura que mezcla el costumbrismo y el realismo para reflexionar sobre una de las etapas más importantes del ser humano. Un obra esencial y necesaria que deberíamos disfrutar en pantalla grande, por lo menos, una vez en la vida.

(Los 400 golpes. 17 de agosto a las 22.00)

Pulp Fiction es una de las películas que más veces he visto en mi vida, junto con Psicosis y El apartamento. En bucle. El año pasado tuve la suerte de participar en una versión teatral dirigida por Carlos Vermut y con un elenco espectacular. Yo era Maria de Medeiros, tristísima por haber olvidado el reloj de Butch. Casi no sobrevivo de tanto placer. Si algún día me caso, pediré el tema del baile de Mia Wallace y Vincent Vega a modo de vals nupcial.

(Pulp Fiction, 18 de agosto a las 22.00)