No perderse en el Circuit: una guía práctica

Hasta el próximo 14 de agosto, Barcelona acoge el Circuit Festival, uno de los festivales de ocio gay más multitudinarios del mundo. Los organizadores esperan que 72.000 personas acudan durante las dos semanas de fiestas, actividades culturales y deportivas y charlas sobre temáticas LGTBI. Tras nueve ediciones, el Circuit ha logrado hacerse su hueco dentro del calendario de eventos de la capital catalana y cuenta con el apoyo de la Generalitat y del Ayuntamiento. Hoteleros, tiendas y restaurantes también aprovechan el tirón de visitantes.

El festival además coincide hoy con el concierto de Beyoncé, ícono gay innegable. De ahí que desde el pasado fin de semana la ciudad sea un hervidero no solo de cuerpos cuidados, camisetas de tirantes más ceñidas de lo usual y grandes gafas de espejos sino también de pelos y lorzas. El 80% de los participantes son extranjeros, según datos de la organización, y vienen en su mayoría del Reino Unido, Francia, Estados Unidos, Rusia y países del medio oriente.

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Querido por muchos, odiados por otros, el Circuit se ha convertido en un referente dentro del imaginario popular de muchos homosexuales, especialmente en Europa, de la quintaesencia de la fiesta estival. Muchos lo ven como un evento que explota económicamente la idea del estereotipo  gay pero otros lo reivindican como un espacio socialización y frívolo goce veraniego. Una polémica que, antes que discutirla, muchos prefieren sencillamente disfrutar. Una guía práctica para no perderse.

¿Qué ofrece el Circuit?

El principal reclamo, no cabe duda, son las 23 fiestas, entre diurnas y nocturnas. El festival compone su programación trayendo algunas de las sesiones de clubs gay de prestigio alrededor del mundo, como las israelíes Forever Tel Aviv y Klubberdome, la holandesa Rápido, la paulista The Week o la londinense Mega Woof, orientada a los osos. Matinée Group, el promotor del evento, también pone de su cosecha propia con la fiesta Pervert (la única gran fiesta gay de los sábados en Barcelona) o la mítica La Leche. Año tras año también ganan peso las fiestas al aire libre, las pool parties. Las entradas oscilan entre los 20 euros y los 100 euros. El brazalete para todos los eventos cuesta 400 euros.

Waterpark, imperdible

La fiesta en el parque acuático de la Isla Fantasía, a media hora de Barcelona, es la fiesta más famosa y emblemática. Es el próximo martes 9 de agosto. Doce horas de música, piscinas y toboganes. La organización ofrece el servicio de transporte desde plaza de Cataluña hasta el parque, en el municipio de Vilassar de Mar (Maresme). Se trata de la fiesta más multitudinaria, por lo cual la recomendación es llegar pronto (las puertas abren a las 10 de la mañana) para poder conseguir una taquilla y salir antes de hora para evitar las colas. Se venden entradas solo para la fiesta del día o el pack que incluye la de la noche.

Dj de siempre

Quien busca música experimental se ha equivocado de festival. La oferta del Circuit pasa por música comercial al 100% y con limitadas aspiraciones artísticas aunque, eso sí, pensada para bailar hasta la extenuación. La lista de dj del Circuit no ofrece estrellas muy conocidas para el gran público pero si personalidades del mundo de la noche gay. Es el caso de Nacho Chapado, Binomio, Isaac Escalante, Pagano, Lydia Sanz o Andre Vicenzzo. El nombre más conocido es el de Offer Nissim, que tendrá su propia fiesta el próximo sábado.

Chicas, ¡bienvenidas!

El Circuit también tiene una oferta específica para el público lésbico, si bien todas las fiestas abren sus puertas a cualquier género. El GirlieCircuit comienza el martes, con la fiesta en la Isla Fantasía, y se extiende hasta el día 14 con fiestas en diversas salas de Barcelona.

Rutas, charlas, deporte…

Muchas fiestas similares, como Black and Blue en Montreal, dedican parte de su taquilla a ayudar en la investigación sobre el VIH o a financiar a entidades que trabajan con la población LGBTI. El Circuit ve el altruismo de otra manera y busca utilizar su gran poder de convocatoria como un escaparate para hacer llegar discursos minoritarios o alternativos. Dentro de la programación hay exposiciones como “Proyecto Género” (Hell Gallery), dedicada a identidades que huyen de estereotipos de género y “Woman Visions” (Mutuo) que profundiza en la representación artística de la mujer desde un punto de vista femenino.

Este año habrá dos rutas por los sitios de Barcelona con una significación dentro del imaginario LGTBI. “Barcelona transgresora”, guiada por el experto en historia del colectivo homosexual Leopold Estapé, “Lesbianas y trans del Raval”, que será acompañada por las periodistas las periodistas Carme Pollina y Thais Morales. Las Panteres Grogues organizan diferentes eventos deportivos durante el festival.