Mercedes Benítez traza un retrato poliédrico de la juez Alaya

Juez Alaya, ¿diosa o demonio? es el retrato que la periodista del diario Abc Mercedes Benítez ha trazado sobre la magistrada que inició la investigación del caso ERE y puso en jaque a la Junta de Andalucía con su verbo afilado y duras tesis incriminatorias. Samarcanda ha editado este libro que refleja una visión poliédrica sobre esta juez que marcó la agenda política andaluza durante cuatro años, entre 2011 y 2015, hasta su ascenso a la Audiencia de Sevilla. “Con sus explosivos escritos, algunos de ellos verdaderos tratados políticos, se convirtió casi en la jefa de la oposición en Andalucía”, resume la autora como metáfora de sus investigaciones, que ensombrecieron la labor del Partido Popular.

La obra recorre sus inicios de brillante estudiante de Derecho y cómo tres décadas después instruyó causas como Mercasevilla que afectaba al Ayuntamiento de la capital andaluza hasta los ERE o los cursos de formación, misiles que han minado la fuerza del PSOE en Andalucía y ante el avance de las pesquisas provocaron la caída del expresidente José Antonio Griñán, que dio paso a su sucesora, Susana Díaz.

“Es un referente en la lucha contra la corrupción, con aduladores y detractores ¿Es una diosa o un demonio? Yo no opino. Están las alabanzas por su labor pero también las críticas por negarse a grabar las comparecencias de los imputados, además de su popularidad en la calle y las redes sociales”, estima Benítez. A pesar de las insistentes peticiones por parte de la periodista, Alaya, que dispone de escoltas pero carece de móvil, declinó opinar para el libro. “Pero es una juez que no necesita dar explicaciones. Siempre que la atacaban, ella se defendía con un auto, no hablaba con los medios pero conocíamos su estado de ánimo”. Y sus respuestas a las críticas desde el partido socialista u otros estamentos incluido el Poder Judicial, están incluidas en el libro para reflejar un carácter duro, hermético y que siempre tuvo al Gobierno andaluz en el punto de mira.

El libro resuelve sucesivas interrogantes sobre la polémica manera de instruir de Alaya, pero sobre todo aclara cómo llegó a formar parte del club de jueces estrella que ha acaparado portadas una semana tras otra gracias a sus autos preñados de una prosa muy particular y subjetiva. A lo largo de 12 capítulos, Benítez destripa los protagonistas del Derecho penal en Sevilla y sus vínculos con las causas más relevantes del último lustro, desde el caso Betis a los avales de la agencia Idea.

Sin embargo, por encima de todo el libro explica cómo Alaya logró imponer la mayoría de sus tesis, gracias a su absoluta soberanía en su juzgado, y cómo provocó el ocaso de una generación de socialistas liderados por los expresidentes Manuel Chaves y José Antonio Griñán. Las preguntas sobre el próximo devenir de las causas judiciales iniciadas por Alaya se acumulan al final del libro, pero gracias a las respuestas precedentes repartidas por 240 páginas se entienden algunos enigmas de su compleja cabeza.