El PSOE quiere que el futuro estatuto incluya libros de texto gratuitos y una renta básica

El estatuto de autonomía madrileño, la norma institucional básica de la región, se encuentra en plena ebullición. Por tercera vez desde la aprobación de la Ley Orgánica que lo rige en 1983, el Parlamento regional se ha propuesto modificarlo para conseguir la regeneración democrática. El PSOE-M ha registrado una enmienda a la totalidad del proyecto de ley presentado por el PP también en la cámara.

José Manuel Franco, diputado socialista, explica que la principal aportación del texto que proponen es “el blindaje de derechos ciudadanos, de tal forma que el partido de turno no pueda cambiarlos a su antojo con una ley ordinaria”. Para modificarlos, sería necesario volver a reformar el estatuto, un trámite complejo que requiere la aprobación de la cámara por mayoría cualificada de dos tercios y de las Cortes Generales con una ley orgánica.

Entre las iniciativas que garantizan el documento socialista se encuentran la gratuidad de los libros de texto en la enseñanza obligatoria en los centros sostenidos con fondos públicos, o una renta básica para quienes lo necesiten, “que garantice unas condiciones de vida óptimas”. Cuestiones que, según el documento, se regularán por ley.

Al mismo tiempo, introducen en el Estatuto el derecho constitucional a la educación, compatibilizando el derecho de los padres a que sus hijos reciban educación religiosa con la laicidad de la enseñanza pública. También reconoce el derecho a la salud mediante un sistema sanitario público de carácter universal, la ayuda a las personas dependientes, la protección contra la violencia de género y la transparencia y el derecho a la información pública.

Franco señala que el texto presentado por los populares les parece “una operación más cosmética que de contenido político, sobre todo porque no incide en la protección de derechos basicos de los ciudadanos”. No obstante, existen coincidencias entre ambas propuestas en cuanto a la eliminación de los aforamientos de los representantes políticos en la Comunidad. “Algo que propusimos la legislatura pasada y que rechazó el PP”, recuerda Franco. La disminución de los diputados de los 129 actuales a 100, constituye otro de los puntos de encuentro, junto a la limitación de los mandatos del presidente de la Comunidad y de los consejeros. No podrán optar a esos cargos las personas que los hayan desempeñado durante al menos ocho años, sean o no consecutivos.

Hasta ahí las coincidencias. El PSOE se opone “frontalmente” al intento del PP de introducir más de una circunscripción electoral. Consideran que es una “medida absolutamente partidista, porque se pierde proporcionalidad entre número de votos y de escaños”.

La propuesta plantea que directivos de empresas públicas comparezcan en la Asamblea para exponer su proyecto y obtener el respaldo de los diputados. “En un procedimiento similar al empleado con los consejeros de Telemadrid”, explica Franco. La propuesta debe ser aprobada en el pleno, después pasaría a una comisión donde el PSOE-M se muestra abierto a “aceptar sugerencias de todos los grupos que puedan contribuir a mejorar el texto”.