La Diputación actúa contra la FECAC por no pagarle el alquiler de su sede

La Diputación de Barcelona está harta de que la Federación de Entidades Culturales Andaluzas de Cataluña (FECAC) no le pague el alquiler. La organización de la Feria de Abril en Barcelona tiene arrendado un local para su sede a la Administración provincial desde 1999 y no abona el pago de la cuota desde febrero de 2014. El órgano acordó ayer iniciar los trámites judiciales necesarios para reclamar el dinero o la entidad tendrá que abandonar el local.

En total la FECAC acumula 34.338 euros de deuda. Según Jaume Ciurana (CiU), miembro de la Junta de Gobierno de la Diputación que acordó la medida, en junio de 2015 esta ofreció fraccionar el pago de la deuda a la organización para facilitarle el pago. La entidad nunca llegó a abonar el dinero con el nuevo sistema y la deuda fue creciendo hasta que en enero de 2016 recibió el primer aviso con un burofax.

El presidente de la FECAC, Daniel Salinero, respondió en Twitter criticando lo que en su opinión es un “trato indigno” de la Diputación con las entidades andaluzas. Salinero reconoció a este diario la deuda y la achacó a la falta de subvenciones desde que el anterior presidente fuera denunciado por defraudar 1,7 millones de euros a la entidad en 2013. “Yo creo que hay un linchamiento hacia lo que representamos”, explicó para añadir que la Diputación les discrimina por motivos políticos y prioriza las subvenciones a entidades independentistas. Además, siempre según su versión, la FECAC lleva sis meses intentando reunirse con la presidenta de la Diputación, la convergente Mercè Conesa, y esta no ha contestado aún. La Diputación negó este extremo y defendió que su obligación es velar por los recursos públicos y la de la FECAC “cumplir los contratos”.

Guerra abierta

El origen de los problemas económicos de la entidad se remonta al proceso judicial de su expresidente por la presunta estafa. Desde entonces, las organizaciones andaluzas se escindieron en dos y mantienen una guerra abierta entre ellas por liderar el asociacionismo andaluz en Cataluña. A pesar de sus malos resultados económicos, la FECAC ha continuado celebrando la Feria de Abril. Este año 2016 fue por ganar un concurso público que abrió el Ayuntamiento de Barcelona por primera vez —antes se adjudicaba a dedo— y que la entidad rival, la fundación Andacat, criticó por “opaco”. Su presidente, Paco Flores, lamentó ayer “la mala imagen que la FECAC está dando sobre los andaluces con sus problemas económicos” y pidió que haga públicas las cuentas de la última edición de la Feria.