Los cómicos

María Díaz es periodista y entre otros puestos ha desempeñado el de jefa de prensa para numerosas compañías de teatro. Un trabajo que implica una relación cercana y directa con los actores, o como ella prefiere llamarlos, con “los cómicos de la legua”.

Esta denominación proviene de la Edad Media y se usaba para los miembros de las compañías itinerantes, nómadas que llevaban sus representaciones a los pueblos y que, por ley, tenían la obligación de acampar a una legua de la población en la que iban a actuar.

Hoy se desplazan en coche, muchos pasan fuera de su hogar más de 300 días al año, y buscan refugios, lugares en los que sentirse un poco en casa. Los restaurantes y bares cumplen esa función y María Díaz les ha pedido que descubran cuáles son sus favoritos. Más de un centenar de cómicos —Asier Etxeandia, Maribel Verdú, Javier Gutiérrez, Pastora Vega, Irene Escolar, Antonio Valero o Lola Herrera— se han prestado y el resultado es La guía gastrocómica, un libro que reúne 900 locales en toda España, organizados por comunidades autónomas.

Casi 150 de ellos están distribuidos por la región de Madrid. Los actores parecen conocer casi todos los rincones, dese la capital y grandes ciudades como Alcobendas a lugares pequeños, como Navalquejigo, un nucleo cercano a El Escorial, donde dos actores, Carlos Hipólito y Jorge Bosch, recomiendan un lugar llamado El Náutico.

Hay varios puntos en común que llaman la atención buscando en la guía. La primera, que los actores comen, literalmente, de todo. Desde gastronomías exóticas a cocina casera. Que tienen buen paladar, pero que tanto como un chef exquisito valoran el buen trato. Y que la mayoría aprecia los lugares que aceptan a grupos grandes y, sobre todo, que cierran tarde.