El juez rechaza la demanda de un mantero atropellado por un urbano
La magistrada ha considerado que las lesiones se produjeron por su conducta "huidiza" para no ser identificado
Una juez de Barcelona ha desestimado la demanda interpuesta por un mantero, que reclamaba al Ayuntamiento de Barcelona 15.781 euros tras ser atropellado por una motocicleta de un agente de la Guardia Urbana, al considerar que las lesiones se produjeron por su conducta "huidiza" para no ser identificado.
En una sentencia, la titular del juzgado de lo contencioso administrativo número 10 de Barcelona ha dado la razón al Ayuntamiento de Barcelona, que en el juicio, celebrado el pasado 19 de abril, alegó que no tenían que pagarle ninguna indemnización al vendedor ambulante porque no se había demostrado la responsabilidad objetiva del consistorio.
El incidente ocurrió el 29 de mayo de 2012 por la tarde, en época todavía de Xavier Trias al frente del Consistorio, cuando el mantero Issa S. estaba con un grupo de otros seis o siete compañeros en el Moll de la Fusta, vendiendo productos en la calle, momento en el que dos agentes de la urbana motorizados se acercaron al lugar.
El mantero empezó a recoger sus pertenencias y uno de los policías se dirigió hacia él con la moto y, según el vendedor ambulante, le golpeó a la altura de la barriga mientras le dijo: "vete a tu puto país" y "al suelo, negro de mierda".
El vendedor ambulante dejó entonces sus pertenencias al suelo y empezó a huir corriendo, momento en el que el mismo agente le atropelló con la motocicleta, pasando la rueda del vehículo por encima de su tobillo derecho, según la versión del mantero.
Por el contrario, la juez concluye que, dada la "ausencia absoluta" de indicios racionales de criminalidad por parte del agente, ya sea por inexistencia de intencionalidad o de imprudencia, no se puede descartar la hipótesis de que el mantero salió corriendo sin mirar, en el momento en el que el urbano iba a proceder a su identificación para denunciarlo por incumplimiento de las ordenanzas municipales, e impactó con una de las motocicletas.
"En consecuencia, todo parece apuntar a que las lesiones por las que se reclama se produjeron por la conducta huidiza del recurrente ante el seguimiento del agente en cumplimiento de sus funciones, siendo la participación de este en la causación de las mismas, nula", remarca la sentencia.
En el fallo, la juez impone las costas al mantero, que ha visto rechazadas en su totalidad sus pretensiones.
En un comunicado, la ONG Sos Racismo, que representó al mantero en el juicio, ha mostrado su decepción por la posición mantenida por el Ayuntamiento de Barcelona -actualmente dirigido por Ada Colau (BComú)-, que cree que ha "rehuido sus responsabilidades ante una mala actuación de un agente de las fuerzas de seguridad públicas".
Para Sos Racismo, la actuación del urbano fue "errónea, desproporcionada, no oportuna e incongruente", y derivó en el atropello y las graves lesiones de un ciudadano, que acabó con el tobillo roto.
Pese a que la sentencia no se puede recurrir, Sos Racismo ha anunciado que buscarán nuevas herramientas para seguir denunciado esta "falta de responsabilidad" de la administración pública y el "maltrato" por parte del "sistema judicial", con el objetivo de restituir los derechos de la víctima y hacer aflorar a los responsables políticos de las fuerzas de seguridad.
"Una ciudad que normaliza la discriminación hacia un colectivo, en este caso los vendedores ambulantes irregulares, no podrá ser nunca una ciudad justa y democrática", advierte Sos Racismo, que entiende que aún existe un "amplio abanico" de posibilidades para que el ayuntamiento dé respuesta a este caso para "indemnizar a una víctima por el error de una actuación municipal".
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