La oposición fuerza a Cifuentes a dar cobertura dental gratuita a los niños

La Comunidad de Madrid, presidida por Cristina Cifuentes (PP), tendrá que dar cobertura dental gratuita a los niños entre 7 y 16 años, a pacientes con necesidades especiales (parálisis cerebrales o displasias) y a personas sin recursos con necesidades perentorias. Este plan de salud bucodental, dotado con 8,6 millones, ha sido aprobado por los tres grupos políticos en la oposición. El PP rechaza que esta cuantía provenga de la supresión del convenio médico que la Comunidad tenía con la Asociación de la Prensa de Madrid.

“Se ha aprobado el dinero. Ahora falta que la Comunidad desarrolle el plan. El papel de la oposición es monitorizar que se cumpla y se lleve a cabo dignamente, porque Madrid está ahora a la cola en lo referente al estado de su salud dental”, explica el portavoz socialista de Sanidad, José Manuel Freire. El PSOE ha sido el impulsor de esta enmienda parcial a los presupuestos de Salud —aprobada con el apoyo de Ciudadanos y Podemos—, que ha permitido trasladar los 8,6 millones del convenio médico con la Asociación de la Prensa a subvencionar la atención de niños y necesitados.

Dentro de esta dotación, alrededor de dos millones de euros irán destinados a crear la Unidad de Salud Bucodental del Sermas y a preparar un Programa de Atención Dental Infantil para la Comunidad de Madrid (PADI), que se pondría en marcha en enero de 2017. Este plan para niños de entre 7 y 16 años se implantará progresivamente por cohortes; es decir, el primer año se atenderá a los niños de siete, el segundo, a los de siete y ocho, y así sucesivamente. “No se puede abordar todo el programa de golpe, así que se tiene que implantar de forma gradual”, explica Freire, que considera “increíble” que la Comunidad todavía no tuviera una unidad central de salud bucodental que controlara estos asuntos.

Este tipo de programas bucodentales ya existe en otras ocho comunidades autónomas: Andalucía, Aragón, Baleares, Canarias, Extremadura, Murcia, Navarra y País Vasco. Esta última región, que fue la primera en implantar el PADI en 1990, tuvo que realizar un amplio muestreo por los colegios vascos con un equipo de dentistas que examinaba a los escolares para ver si tenían problemas bucodentales y en qué grado. Freire insta a que se realice también en la región: “Cada año nacen aquí 65.000 niños, no puede ser que la Comunidad de Madrid no tenga datos sobre cómo está la salud dental de los críos. Lo primero es tener información”.

4,5 millones para los adultos

En el caso de los adultos, hasta ahora estos solo tenían derecho a un tratamiento odontológico público en caso de inflamación aguda por un flemón o por la necesidad de extracción en las encías. Ahora los pacientes madrileños sin recursos y aquellos que necesiten cuidados especiales en la boca —derivados de enfermedades como displasia o parálisis— tendrán la atención bucodental gratuita. Para ello, la Comunidad destinará alrededor de 4,5 millones de euros.

El PSOE exhorta a empezar “lo más rápido posible” este plan de ayuda a las personas sin recursos y con graves déficits en salud dental. “Hay que empezar a atender ya a las personas pobres que tienen necesidades agudas de salud dental y están abandonadas. Hay personas sin dientes y con problemas muy graves en la boca que no pueden tratarse porque no pueden pagar un dentista. No podemos hacer como si no existieran”, asegura Freire.

Para el socialista, esta es una de las necesidades más urgentes, ya que se trata de un “área olvidada” de la salud pública. “Un informe en Reino Unido desveló que las personas sin recursos tienen hasta ocho piezas dentales menos que la población más rica. Las sociedades desarrolladas no podemos permitir esto”, asegura.

Aunque el plan concreto todavía está sin desarrollar —corre a cargo del Gobierno regional—, el PSOE propone incluir como servicios públicos para estos tres colectivos el sellado dental, la reparación de fracturas y el tratamiento de caries permanentes. Además, los profesionales que atiendan pueden ser tanto trabajadores del sector público como del privado. “Podrían ser dentistas a los que le paga por consulta y atención a cada paciente”, sostiene Freire.