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El PSOE presiona para no prohibir las motos en días de contaminación

Carmena quiere cortar su circulación, como la de los turismos, cuando se dispare la polución

Nube de contaminación sobre Madrid en 2012.
Nube de contaminación sobre Madrid en 2012. ULY MARTÍN

El Partido Socialista ha presentado alegaciones a la intención del Ayuntamiento de Madrid de prohibir la circulación de motocicletas los días en los que la contaminación se dispare y se restrinja también el tráfico a los turismos. El concejal socialista José María cree “conveniente excluirlas de las restricciones hasta que no se haya observado el resultado con el resto de vehículos”. El sector de las dos ruedas alegó por su parte que “existen sobradas evidencias de que la moto contamina menos". Pero la edil de Medio Ambiente, Inés Sabanés (Ahora Madrid), recuerda que las motos más comunes en la ciudad “normalmente tienen el mismo o más nivel de contaminación” que los turismos de gasolina.

Tal y como adelantó EL PAÍS, el protocolo de medidas contra la contaminación que el Ayuntamiento aprobará en noviembre prevé que las restricciones al tráfico de vehículos por la almendra central (el interior de la M-30) afecten también a las motocicletas. El texto es mucho más restrictivo que el protocolo que entró en vigor en marzo, bajo el mandato de Ana Botella (PP).

La anterior alcaldesa decidió a última hora eximir a las motocicletas de la prohibición de circular en los días con peor calidad del aire, decisión que prevé revertir el nuevo gobierno municipal, aunque el texto está aún en periodo de alegaciones y sujeto pues a cambios. La alegación del PSOE es clave porque este partido sostiene en el gobierno municipal a la alcaldesa, Manuela Carmena (Ahora Madrid). El resto de fuerzas de la oposición (Partido Popular y Ciudadanos) también está en contra de aplicar la restricción a las motocicletas.

Las restricciones comenzarán en semanas

  • Cortes de tráfico. Las restricciones de tráfico en episodios de alta contaminación no son un brindis al sol: de estar aprobado ya el protocolo (lo estará en unas semanas), se habría prohibido circular a la mitad de vehículos por la almendra central del 2 al 5 de enero de 2015.
  • Sin aparcar. Además, habría sido imposible aparcar en las plazas reguladas con parquímetros entre el 1 y el 10 de enero.
  • Tres días sin coches. En 2014, se habrían activado estas medidas en ocho ocasiones: 11 días sin aparcar y 3 días sin circular (del 28 al 30 de octubre). El peor año habría sido sin embargo 2011, con seis días de restricciones en febrero, dos en abril, nueve en septiembre, ocho en octubre y dos en diciembre.

Madrid supera el máximo legal de dióxido de nitrógeno fijado por la Unión Europea en 2010, y se arriesga a una multa millonaria, que se suma a las graves repercusiones sanitarias derivadas de esas emisiones. El dióxido de nitrógeno proviene fundamentalmente del tubo de escape de los vehículos de gasóleo.

El Ayuntamiento ha calculado que el factor de emisión de óxidos de nitrógeno de las motocicletas que más recorridos hacen habitualmente por la almendra central (las de menos de 250 centímetros cúbicos) es superior al de los turismos de gasolina (0,21 gramos por kilómetro frente a 0,10).

Las motocicletas de mayor cilindrada tienen un factor similar a los turismos de gasolina (0,12); el de los ciclomotores es algo superior (0,16). En comparación, el factor de emisión de los turismos diésel oscila entre 0,30 (para los que cumplen la normativa Euro 6) y 0,87 (para la Euro 5).

El Ayuntamiento considera que "el beneficio de las motos es evidente porque ocupan menos espacio y dan fluidez al tráfico". “Pero no hablamos de situaciones normales” sino de días muy contados, explicó la semana pasada Inés Sabanés, que no ve “lógico” permitir circular esos días a las motos y no a los turismos de gasolina, cuando ambos emiten lo mismo. "Hablamos de días en que hay que bajar la contaminación por una cuestión de salud", aseguró.

El concejal socialista cree que el protocolo en sí es “un avance”, pero “la urgencia de su redacción no ha permitido una adecuada evaluación del alcance de todas las medidas contempladas”. El protocolo es prácticamente idéntico al que está en vigor desde marzo, sólo han cambiado los niveles a partir de los cuáles se aplican las medidas de restricción al tráfico y algún detalle puntual como la extensión de la prohibición a las motocicletas.

Como en la norma ya en vigor, también se restringe la circulación de taxis vacíos por la almendra central los días de alta contaminación. El PSOE tampoco está de acuerdo: “Limitar el tráfico de taxis libres en el interior de la M-30 ni tiene sentido ni es viable. El taxi es un servicio público y, como tal, igual que el resto de transportes públicos, debe estar exento de las restricciones aplicadas a los vehículos privados. No se deben poner trabas al taxi sino considerarlo parte de la solución a los problemas de contaminación generados por el tráfico”.

Los cortes, según la matrícula

En julio de 2014, Botella anunció la elaboración de un protocolo de actuación para episodios de alta contaminación. Madrid supera el máximo legal de dióxido de nitrógeno fijado por la Unión Europea en 2010, y se arriesga a una multa millonaria, que se suma a las graves repercusiones sanitarias. El dióxido de nitrógeno proviene fundamentalmente del tubo de escape de los vehículos de gasóleo.

Madrid tiene 24 estaciones de medición; la zona crítica es el interior de la M-30 (la almendra central), con 10 medidores. El protocolo anunciado en julio de 2014 establecía una serie de medidas de restricción del tráfico y los niveles a partir de los cuales se activarían. Entró en vigor finalmente el pasado 1 de marzo, pero el nuevo gobierno municipal, presidido por Manuela Carmena, decidió el mes pasado endurecerlo. Aprobó un nuevo texto, que ahora está en periodo de alegaciones y entrará en vigor en unas semanas.

Este nuevo protocolo fija un nivel de preaviso (cuando dos estaciones de la almendra central, o de otra de las cuatro zonas de la ciudad, superen dos horas consecutivas los 180 microgramos de dióxido de nitrógeno por metro cúbico) y un nivel de aviso (200 microgramos). Además, la Unión Europea ha determinado un nivel de alerta (400 microgramos durante tres horas consecutivas).

El primer día de preaviso se limita la velocidad en la M-30 y en las autovías de acceso a 70 kilómetros por hora. El segundo día de preaviso o el primero de aviso se prohíbe además aparcar en el área regulada con parquímetros a los vehículos que no sean del barrio. El segundo día de aviso, además de todo lo anterior, se prohíbe circular por la almendra central a la mitad de vehículos (matrícula par o impar) y a los taxis vacíos. Con alerta, la prohibición se amplía a la M-30.

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