La Xunta multa a la Confederación Miño-Sil por cortar un árbol en Sarria
Conservación da Natureza castiga a este organismo del Ministerio de Medio Ambiente porque el bosque era candidato al Catálogo de Árbores Senlleiras. Miembros de la Plataforma Sarriana polo Río habían sido sancionados por tratar de impedir esa tala
601,02 euros le costará a la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS) saltarse la veda que amparaba al conjunto de árboles de ribera que forman el pulmón verde de Sarria y son símbolo de una imparable lucha vecinal que está a punto de cumplir dos años. Según el colectivo ecologista Adega y ese movimiento vecinal aunado bajo el nombre de Plataforma Sarriana polo Río, la multa iba a ser 10 veces mayor. Pero al final, al organismo responsable de las cuencas, que depende del Ministerio de Medio Ambiente, la Xunta le ha perdonado la cantidad equivalente a la tala de nueve árboles y solo sanciona por uno. La Dirección Xeral de Conservación da Natureza entiende que la Confederación no debía de saber, cuando ordenó cortarlos para acometer las polémicas obras de encauzamiento en el río Sarria, que el conjunto estaba protegido de manera cautelar mientras no se resolviese un expediente abierto para su inclusión en el Catálogo de Árbores Senlleiras de Galicia.
El árbol al que se refiere la sanción, con fecha del 9 de septiembre de 2015, crecía en las inmediaciones del puente de O Toleiro, también desaparecido en este mismo proyecto, llamado a cambiar radicalmente el paisaje urbano de los vecinos de Sarria. La resolución de la Xunta, hecha pública hoy por los colectivos que luchan por conservar la naturaleza y la fisonomía del lugar, dice que "consta suficientemente probado que el 7 de abril de 2014, teniendo conocimiento la CHMS de la orden de paralización de la tala, se produjo el derrumbe de un árbol, hecho que vulneró el régimen preventivo vigente". Un mes antes, el 13 de marzo, Adega había solicitado la inclusión del bosque del río Sarria en el Catálogo de Senlleiras. Y el 25, es decir, 12 días después, la Confederación taló varios ejemplares. El 7 de abril, uno más. Y el grupo ecologista presentó una denuncia. El instructor del expediente sancionador propuso ponerle una multa al ministerio de 6.010,13 euros por esta agresión continuada en el tiempo al conjunto de alisos, uno de los mejor conservados y en mejor estado de salud de la comunidad autónoma. Pero, según Adega, "la directora general rebajó la cantidad a 601,02" y perdonó el resto.
La Plataforma Sarriana y Adega aseguran que no es cierto que la CHMS no estuviese informada el 25 de marzo de que la Xunta estuviese tramitando la catalogación de los ameneiros. "La Confederación Hidrográfica era perfectamente conocedora de esa prohibición", defienden los colectivos, porque "incluso en el resumen de prensa del propio organismo de fecha 14 de marzo de 2014 aparecen noticias referidas a la solicitud de catalogación y el veto de tala que eso conlleva".
Por si esto fuera poco, aquel mismo 25 de marzo de 2014 el juzgado de Instrucción de Sarria había ordenado la paralización cautelar de la corta. Algo que "la Confederación incumplió también", recuerda la Plataforma polo Río, "y por lo que se instruye un procedimiento penal en el que está imputado el presidente del organismo, Francisco Marín, por presunto quebrantamiento de la medida".
Los dos colectivos recalcan en una nota que la sanción de la Xunta, al igual que las diligencias judiciales y el respaldo de varias instituciones tan significativas como el Consello da Cultura Galega, es un elemento más que refuerza sus batallas cotidianas. "Queda así demostrado que la tala de la primavera de 2014 era ilegal; y resulta especialmente lamentable que miembros de la Plataforma Sarriana polo Río fuesen sancionados por intentar impedirla", denuncian: "La obra de encauzamiento está basada en un cúmulo de infracciones legales de índole medioambiental, patrimonial, urbanístico y administrativo".
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