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Una Procesión Cívica laica y reivindicativa

Puig y Ribó reclaman al Gobierno español una financiación justa para los valencianos La marcha de la bandera ha transcurrido entre protestas, aplausos y mucha policía

Cristina Vázquez
El alcalde de Valencia, Joan Ribó, con la 'senyera', durante la Procesión Cívica.
El alcalde de Valencia, Joan Ribó, con la 'senyera', durante la Procesión Cívica. MÒNICA TORRES

La Procesión Cívica se ha teñido este año de laicidad y reivindicación. Un acto laico porque el nuevo Gobierno local surgido de las urnas el 24-M -una coalición de la que forman parte Compromís, PSPV y València en Comú- estableció que la senyera no entrase a misa en la catedral como sucedía antes, y reivindicativo porque tanto el alcalde Joan Ribó como el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, han aprovechado el 9 d'Octubre, Día de la Comunidad Valenciana, para demandar al Gobierno español una financiación justa para los valencianos.

Miles de valencianos han acompañado en procesión a la senyera por las calles de Valencia para rememorar la entrada de Jaime I a la ciudad en 1238, en un acto que se ha desarrollado sin incidentes, aunque con algunos gritos e insultos por parte de grupos ultra regionalistas.

La bandera ha bajado puntualmente al mediodía por el balcón del Ayuntamiento, sin inclinarse, al son -otra de las novedades de este año- de la Marcha de la Ciudad, una composición anónima del siglo XVI que, según el protocolo acompaña tradicionalmente a la enseña. Luego han sonado los himnos valenciano y español.

La comitiva que ha encabezado Ribó, que este año portaba la enseña, ha estado protegida por un amplio despliegue policial. A lo largo de la marcha, más crispada que otros años, se han oído gritos contra el alcalde. "Ribó, dimisión", han coreado ciudadanos ataviados como camisetas donde se podía leer Som valencians, no catalans. También han proferido gritos de "¡Fuera!" y "¡Traidor! pero no se han producido altercados de importancia. En otros tramos del recorrido, el desfile ha sido recibido con los aplausos del público. 

La bandera ha llegado aproximadamente a las 13 horas al Parterre, donde el presidente Puig junto con los portavoces de los partidos con representación en el Ayuntamiento de Valencia, han participado en la ofrenda al rey Jaume I. "He visto más aplausos que nunca. Creo que los valencianos estamos más unidos ahora que hace mucho tiempo, de hecho hemos firmado un acuerdo por una financiación justa donde solo pedimos aquello que nos corresponde, no queremos confrontar con nadie", ha dicho el presidente.

A las puertas del Consistorio, finalizado el acto, Ribó se ha manifestado "cansado" pero "satisfecho y orgulloso" de haber portado la bandera. "El día ha transcurrido con normalidad, que es lo importante. Ha habido opiniones diferenciadas como en toda democracia y lo único que puedo decir es que la gente identifica mi lugar de nacimiento [Cataluña] con mi forma de pensar y una cosa no tiene que ver con la otra", ha respondido el alcalde a los que le han gritado "catalanista".

Al igual que el presidente de la Generalitat, el regidor de Valencia ha exigido al Gobierno español mejores inversiones y financiación para la ciudad y la comunidad autónoma.

El delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Moragues, ha asegurado que romper costumbres y tradiciones como la entrada de la senyera en la catedral de Valencia "divide" y genera "más enfrentamiento", y ha apelado a la "unión" del pueblo valenciano.

El portavoz municipal del PP, Alfonso Novo, ha lamentado también que la Procesión Cívica no se haya desarrollado este año con la solemnidad y respeto que merecen las tradiciones e historia de los valencianos. "Hemos asistido a un acto incompleto por la eliminación del Te Deum, en la que además sin previo aviso el Gobierno municipal ha suprimido el himno valenciano y español al finalizar el acto", ha denunciado Novo.

Una hora antes de que arrancase la Procesión Cívica, el arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares ha oficiado en la catedral, como en años anteriores, la ceremonia religiosa del Te Deum, al que se han sumado políticos del PP y de Ciudadanos.  La exalcaldesa de Valencia y senadora del PP, Rita Barberá, ha asistido al acto religioso pero no a la procesión cívica.

Miembros del colectivo Lambda de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales de Valencia han denunciado haber sido víctimas de insultos y agresiones durante la Procesión Cívica en Valencia por parte de grupos de extrema derecha. La policía también ha detenido a otras dos personas.

Manifestación por la financiación

Por la tarde, cientos de personas se han manifestado bajo el lema Nou finançament, nou país en una marcha por el centro de Valencia, que ha transcurrido en un ambiente festivo, aunque la policía ha identificado al comienzo a varios participantes.

Los agentes han requisado decenas de palos de madera que iban a ser usados como mástiles de banderas y de pancartas, han identificado a varios de los asistentes y han retenido a otro, lo que ha provocado pequeños forcejeos y algún momento de tensión.

La manifestación, respaldada por formaciones nacionalistas y de izquierda, sindicatos y entidades sociales, ha comenzado con el horario previsto y con la música como gran protagonista. Durante la marcha han podido verse pancartas con lemas a favor de una mejor financiación estatal para la Comunidad Valenciana junto a banderas independentistas.

Entre los asistentes han figurado, entre otros, la coordinadora de Esquerra Unida, Marga Sanz; el portavoz de Els Verds, Joan Francesc Peris; el secretario general de CCOO-PV, Paco Molina, y el cabeza de lista de la Candidatura de Unidad Popular (CUP) en las últimas elecciones catalanas, Antonio Baños.

Algunos asistentes han proferidos gritos contra el nuevo gobierno local, al que han llamado "catalanista".
Algunos asistentes han proferidos gritos contra el nuevo gobierno local, al que han llamado "catalanista".MÒNICA TORRES

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Sobre la firma

Cristina Vázquez
Periodista del diario EL PAÍS en la Comunitat Valenciana. Se ha ocupado a lo largo de su carrera profesional de la cobertura de información económica, política y local y el grueso de su trayectoria está ligada a EL PAÍS. Antes trabajó en la Agencia Efe y ha colaborado con otros medios de comunicación como RNE o la televisión valenciana À Punt.

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