Barcelona, sede de una aceleradora de ‘startups’ nacida en París
The Family confía en la creatividad de una generación frustrada por la falta de oportunidades
Barcelona sigue atrayendo inversiones de nuevo cuño. La última procede de París. Se llama The Family, una firma que hace dos años y medio era solo un proyecto en la cabeza de tres emprendedores franceses que utilizaban un pequeño apartamento para poder trabajar. Hoy, esta empresa ocupa un bello palacete del barrio de moda de la capital francesa, Le Marais, en el que 270 nuevas empresas (startups) han encontrado apoyo para acelerar su crecimiento. La próxima semana empieza a trabajar en Barcelona, donde quiere instalarse. Cree que va a encontrar una generación de jóvenes sin oportunidades, pero plenos de talento y de creatividad.
La sala principal de esta empresa, junto a La Bastilla, es una amplia zona moderna y luminosa que invita a quedarse: suave música de ambiente, wifi potente y gratuito, decoración exquisita. “No es que los emprendedores sean más estilosos que el resto, es que la presión de trabajo es tan fuerte que no hay elección. O cuentas con un espacio agradable donde trabajar o realmente te hundes. Y no tienes tiempo para dedicarte a crearlo por ti mismo”, explica la presidenta y cofundadora de The Family Alice Zagury, de 31 años.
Quizá una empresa de corte anglosajón obtuviera mayor éxito en España. ¿Cuál es el atractivo de que sea una firma francesa la que lo intente? Zagury lo tiene claro: “El problema europeo es que funcionamos sobre una base tóxica. Este es un continente de cultura católica que no digiere bien la ambición y que cuenta con una legislación disuasiva para los emprendedores. En Barcelona, como en París, tenemos problemas similares. Los mejores talentos se tienen que marchar. Y eso es lo que hay que romper. En ello trabajamos”.
Fama anglosajona
París se ha convertido en los dos últimos años en un importante centro de emprendimiento con apoyo público y privado que está dando sus frutos aunque, de momento, los anglosajones sigan detentando la fama. Aquí nació, por ejemplo, BlaBlaCar, una de las 90 firmas que han invertido en The Family. “Nosotros ya hemos apoyado a seis nuevas empresas francesas”, explica Martin Migmot, del fondo británico Index Venture, que también ha entrado en el capital de The Family.
La experiencia de The Family es positiva. Además de contar con el apoyo de inversores, decenas de empresas han multiplicado con su ayuda sus cifras de negocio gracias a su acompañamiento. Acelera el crecimiento de las startups con su asesoramiento, si bien no es exactamente una aceleradora: invierte en el capital de las que acuden a ella (entre el 3% y el 5%). Save my smartphone es una de esas startups que ha contado con su apoyo. Un joven experto en reparar móviles, deseoso de dar el salto, es hoy el presidente de una firma que cuenta con 250 empleados y alcanza los dos millones de euros en cifra de negocio al mes.. En el sótano de la sede de The Family se ha instalado Nestorparis. Aquí preparan hoy 150 comidas que reparten a domicilio cada día, pero el crecimiento es espectacular: del orden del 20% a la semana. “El lunes distribuiremos ya 200 comidas”, explica uno de sus responsables. La base de ambas firmas es una buena plataforma web y precios competitivos para el consumidor.
Zagury y otro de sus fundadores, Oussama Ammar, inician su experiencia barcelonesa mañana. Tienen ya identificado un bello edificio que podría ser su sede catalana y han contactado previamente con 45 emprendedores a los que ofrecer sus consejos. Después, los interesados podrán beneficiarse de sus facilidades de inversión, del acceso a sus servicios y de la sinergia que ofrece un lugar en el que hay también conferencias, seminarios e incluso contactos profesionalizados con las instituciones, aunque su cultura es contraria a la subvención.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.