Para adolescentes

Las propuestas de ocio cultural para espectadores adolescentes no abundan, pero poco a poco, esa franja de edad se consolida como uno de los públicos emergentes con más vigor. Un ejemplo notable de la tendencia es el festival FESTeen, Festival de Cultural Joven de Madrid, que este fin de semana llega a su tercera edición. En la anterior, registró una asistencia de 7.000 jóvenes y 2.000 participantes en las 70 actividades organizadas.

El sábado y el domingo de 11:00 a 21:00 diversos espacios del recinto —Nave 16, Cineteca, Central de Diseño, entre otros— estarán dedicados a chicos y chicas de 12 a 21 años. La entrada es gratuita, pero hay actividades que requieren inscripción en mataderomadrid.org, con el único requisito de que los menores de edad deben completar una ficha de autorización.

Los más activos podrán colaborar en una pequeña pieza audiovisual (Taller Cinemasrock), en un concurso de graffiti rápido, en el mural colectivo One Wall, One World o en la escritura de un manifiesto sobre la ciudad ideal para los jóvenes. En lo deportivo, lo más llamativo es la competición en distintas disciplinas de ciclismo urbano; en lo escénico, el recital de Poesía enfadada y desenfadada y el Karaoke Teatral y en cuanto a tecnologías, el taller Tech4girls, para chicas de 12 a 15 años.

Pero el público adolescente no solo suscita eventos monográficos, en los últimos años, importantes museos han desarrollado programas en esa dirección, como el programa < 18 del Reina Sofía, o ¿Quedamos en El Prado?, del museo homónimo, en el que se inventa una historia a partir de ciertas pinturas y luego se recrea en formato cómic mediante tablets. El Thyssen Bornemisza organiza La noche joven, que consta de una visita temática (en torno a una obra, autor o exposición temporal) y un taller posterior.