Quiroga asegura que nadie del PP vasco le ha pedido su dimisión
Reconoce que ya se esperaba los malos resultados, pero que está comprometida con el actual proyecto
Arantza Quiroga seguirá en su cargo de presidenta del PP vasco, Arantza Quiroga, porque nadie le ha pedido que dimita a pesar de los malos resultados de esta formación en las elecciones municipales y forales del 24-M, con la excepción de Álava y en especial del Ayuntamiento de Vitoria. Así lo ha reconocido al detallar la reunión mantenida por su ejecutiva.
Quiroga se esperaba este varapalo en las urnas y confía en el que el acuerdo entre PNV y PSE les deje un hueco para mantenerse como referencia en algunas instituciones. De momento, el objetivo es evitar un acuerdo que desbanque a Maroto en la alcaldía de Vitoria.
La líder de los populares vascos ha manifestado que no teme quedarse en minoría en la Ejecutiva ante el empuje del PP alavés, y ha destacado que su partido en Euskadi "tiene tres patas". "Yo estoy dispuesta a trabajar, a salir adelante y a dejarme la piel en este proyecto porque merece la pena, pero no estoy aferrada al cargo", ha aseverado.
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Quiroga ha apuntado que en la reunión que la dirección del PP vasco tuvo este miércoles en Vitoria, nadie le pidió que abandonara el cargo "ni hubo reproches". "Yo me comprometí a hacer un planteamiento claro de estrategias, de trabajo a corto, medio y largo plazo", ha añadido.
"Hay que ser conscientes de dónde venimos y a dónde vamos"
Asimismo, ha señalado que, desde que es presidenta del PP vasco, "ha ido dibujando este escenario" del día después de los comicios, tal como trasladó a los órganos del partido. En este sentido, ha reiterado que ya se esperaba estos resultados.
Tras recordar "las grandes dificultades" que ha tenido en el pasado su formación en Euskadi por la amenaza de ETA, ha apuntado que, cuando esta época acaba, los populares se han quedado, "de alguna manera, desnudos", a lo que se ha unido "una falta de estructura".
"Hay que hacer una reflexión muy cruda, muy realista y ser conscientes de dónde venimos y a dónde vamos. Esto es lo que, en estos momentos, estamos viendo, analizando y trabajando porque no puedes quedarte quieto y lamiéndote las heridas", ha añadido.
A su juicio, hay que trabajar "porque hay un futuro, una esperanza, porque el PP vasco tiene una fortaleza en uno de los territorios, como es Alava y es Vitoria". "Esto es pico y pala, y ponerse a trabajar, y seguir y pedalear", ha aseverado.
Arantza Quiroga ha admitido que los malos resultados en algunos lugares han sido "muy dolorosos", como ha ocurrido en Errenteria, Pasajes, Eibar, municipios guipuzcoanos en los que se han quedado sin representación. "Pero es la historia de este partido y algunas de sus personas vienen exhaustas después de aguantar durante muchos años", ha añadido.
Según ha dicho, Alava es una referencia, y "el camino" que ha realizado el PP alavés tiene que ser "el objetivo también para Bizkaia y para Gipuzkoa en un contexto muy distinto", para introducirse "mucho más en la sociedad", teniendo en cuenta que ahora, cuando pide a la gente "que dé un paso", no significa que "cambie su vida de arriba a abajo y tenga un riesgo".
"Esto no es un proyecto a corto plazo porque la estructura de un partido no se crea de la noche a la mañana. Hay cosas que funcionan bien y hay que reforzarlas, pero esto es un proyecto a largo-medio plazo, y nunca lo he ocultado", ha manifestado.
A su juicio, "la mano no ha venido buena" para el PP en estas elecciones, pero "puede verse cambiada y en otras circunstancias en las elecciones generales". "Nosotros tenemos que hacer nuestro recorrido como PP vasco y tenemos que saber que tenemos un camino que recorrer, que yo estoy segura que hay un espacio político para el PP en el País Vasco, y tenemos que estar ahí y agrandarlo cada vez más", ha manifestado.
Por ello, ha añadido que el partido requiere de "perfiles de personas muy diferentes, mucho más profesionalizados, y que se vaya sumando a más personas". "Estoy segura de que vamos a tener éxito", ha indicado.
La líder de los populares vascos ha manifestado que no puede contar "una milonga" y decir que no esperaban los resultados del 24-M porque "lo veían venir". Además, ha destacado que sabían que en Guipúzcoa iba a haber una polarización del voto entre PNV y Bildu.
En este sentido, ha admitido que algunos de sus votos se han ido al PNV porque "las ganas de echar a Bildu de las instituciones eran muy evidentes, y ese voto útil se ha ido ahí". "Y, en Bizkaia, en lugar de eso, es que no hemos sido capaces de movilizar a nuestros propios votantes porque es verdad que ha habido otras opciones que han podido salir como Ciudadanos, pero que tampoco han sido tan dañinas para el PP ni muchísimo menos", ha apuntado.
En su opinión, tanto el PNV como el PSE-EE, "ahora mismo, en ese eje que puedan configurar, van a tratar de ir en esa dirección". "Por eso, nosotros tenemos que ser claros, tenemos que esta ahí, defendiendo algo que nos creemos y que ha sido seña de identidad del PP durante todos estos años, que es la defensa de la foralidad de los territorios históricos y de la descentralización", ha manifestado.
Además, ha considerado que en determinadas políticas que están en el ámbito foral, como es todo el tema de fiscalidad, los populares tienen "un papel muy importante y decisorio".
Sobre la victoria del popular Javier Maroto en Vitoria, ha recordado que ha sido "muy contundente y cada uno sabrá lo que quiere hacer, pero, si se ha dicho que se respetan las listas más votadas, ése debe ser el criterio, y es que, además, ha ganado con una contundencia respecto a los partidos y a los candidatos siguientes que es evidente que se puede ver de todo, pero sería un error".
En su opinión, "los mensajes tienen que estar muy incardinados en cada uno de los territorios y sabiendo cuál es la sociología de los territorios". "Pero sí creo que hay un modelo de trabajo, de planteamiento, de constancia, de inteligencia política también y de modelo de estructura, que hay que trasladarlo", ha indicado.
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