Izagirre responsabiliza al Ministerio del recorte de presupuesto
El alcalde de San Sebastián exige que el Gobierno central aporte 11 millones y explique en qué plazos
El alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre, ha responsabilizado esta mañana al Ministerio de Cultura del nuevo recorte sufrido en el presupuesto de San Sebastián 2016. Si la capitalidad contaba hasta ahora con 63,6 millones, la última cifra con la que trabaja, según anunció el director del proyecto, Pablo Berástegui, el pasado viernes, es de 47,8, un 25% menos. Berástegui aseguró que ha ajustado el presupuesto de la capitalidad ante el hecho de que el Ministerio, de momento, ha aportado cuatro millones, en vez de los 12 que el equipo había previsto. Berástegui puntualizó que el Ministerio nunca se había comprometido a dar esa cifra.
Sin embargo, Izagirre, también presidente de la Fundación San Sebastián 2016, ha exigido al Gobierno central que si "está en 2016 lo que tiene que hacer es cumplir con la previsión que existe y decir en qué plazos piensa aportar los 11 millones recogidos en el presupuesto" del proyecto.
Izagirre ha defendido incluso que "el presupuesto de 2016 es exactamente el mismo", y que lo que ha hecho la dirección del proyecto es "ajustar los gastos" hasta asegurar las partidas del Ministerio de Cultura, que solo otorga financiación ligada a proyectos específicos, y la "financiación privada".
San Sebastián 2016 todavía no ha conseguido ningún patrocinador privado a pesar de que el proyecto se había fijado como meta cubrir el 15% de sus cuentas, al menos cuando el presupuesto que se barajaba era de 63,6 millones, lo que suponía 9,5 millones, a través de la colaboración con empresas, la venta de entradas y merchandaising. Izagirre ha asegurado que ya están comprometidos tres o cuatro millones a través de patrocinadores privados, además de mostrarse confiado en que finalmente se alcanzarán esos 9,5 millones. Desde la oficina de San Sebastián 2016 han precisado posteriormente que los cuatro millones es la nueva cantidad prevista cubrir con ingresos propios, no que la capitalidad cuente ya con esa financiación.
De hecho, Berástegui explicó el viernes que “siempre quisimos que San Sebastián 2016 no fuera un agujero económico. Buscamos alianzas dentro de la sociedad civil”, aseguró en referencia a los patrocinadores privados, “pero no podemos comprometer más gasto” de los ingresos que “podemos producir”.
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