El homenaje a Ordóñez se celebra pese a la nieve y el temporal

La nieve no ha cerrado el paso al homenaje que el Parlamento ha brindado al dirigente del PP, parlamentario y portavoz municipal en San Sebastián Gregorio Ordóñez, asesinado por ETA en enero de 1995.  Representantes de todos los partidos políticos, -por la izquierda abertzale estaba Marian Beitialarrangoitia-, se han unido en el recuerdo a quien fuera asesinado hace ahora 20 años. El emotivo acto se ha celebrado en medio de una intensa tormenta de nieve que ha reducido la participación y el tiempo, al pasar de los cinco minutos de silencio a dos, y ha impedido la participación del portavoz del PNV, Joseba Egibar, o del miembro de EH Bildu, Unai Urruzuno. El lehendakari sí que participó con los miembros de su Gabinete.

El de Ordóñez era el último homenaje que quedaba por ofrecer a los familiares de los parlamentarios asesinados por el terrorismo y tras los que ya han celebrado por el socialista Enrique Casas, asesinado en 1984 por los Comandos Autónomos Anticapitalistas, por el independentista Santiago Brouard, asesinado por los GAL ese mismo año, y por el socialista Fernando Buesa, asesinado en 2000 por ETA. El homenaje silencioso se ha desarrollado en el Parlamento Vasco junto a una gran foto de Ordóñez colgada en la escultura "Brújula de medianoche", la escultura dedicada a las víctimas y a un pebetero que permanecerá encendido toda la jornada, como ya sucedió con el resto de homenajes