Unas cervezas en el parque

1. Bar La Unión.Hay bares que hacen barrio, y este es uno de esos. Es el bar donde siempre bajo a tomar unas cañas o a comerme las mejores alitas de pollo de la ciudad. Oscar, su dueño, es de los que te alegran el día. Mi bar favorito de lejos. (c/ Villaamil, 7)[/TEX].

2. La Dehesa de la Villa. Es el lugar donde suelo salir a correr. Me gusta porque escapa del típico parque diseñado, organizado y geometrizado. Es un fantástico pinar casi salvaje, hecho a base de senderos naturales originados por el paso de la gente.

3. Museo Geominero. Quizá sea uno de los museos y espacios más desconocidos de Madrid. Suelo ir bastante a pasear y distraer la mente observando maravillosos minerales, fósiles y rocas. Su sala principal es, posiblemente, uno de los rincones más bonitos que conozco. (c/ Ríos Rosas, 23).

4. Sala Moby Dick. Me pilla al lado de casa. Así que esta mítica sala de conciertos se ha convertido en una de mis mecas musicales. Solía ir dos y tres veces a la semana para distraerme y escuchar buena música. Por aquí pasan las mejores bandas nacionales e internacionales. Recuerdo los conciertos de Clem Snide, Lacrosse, The Horrors, Neuman… (Avenida de Brasil, 5)[/TEX].

5. Filmoteca española. Cine Doré. Durante muchos años solía visitarlo cada viernes por la tarde como una actividad totalmente introspectiva. Compraba entradas sin saber muy bien qué me iba a encontrar. Conocí a Michelangelo Antonioni, Jean-Luc Godard, John Ford, Juan Antonio Bardem, Luis García Berlanga o Basilio Martín Patino. Casi toda mi cultura cinematográfica se forjó en esta sala. (c/ Santa Isabel, 3).

6. Barrio de Tetuán. Siempre he creído y defendido que Madrid no se encuentra en la carismática Gran Vía ni en la puerta del Sol ni en Malasaña o Chamberí. Madrid son sus gentes y esas gentes están en Carabanchel, Vallecas o Tetuán. Así que si quieres ver Madrid de verdad, pasearse por este barrio tan multicultural es una de las mejores opciones.

7. Donde Sánchez. Sin duda el mejor lugar para tomarte unas cervezas, a poder ser Salvaje, en este mercado de barrio. Paz, la dueña del puesto, es todo amor y dulzura y sus referencias de vinos, cervezas y otros productos gastronómicos son todo un acierto. (c/ Santa Isabel, 5. Mercado de Antón Martín).

8. Campus Universidad Complutense. Los campos de deporte en la zona sur siempre me parecieron un pequeño oasis. Un sitio perfecto para ir a escalar, jugar al voley-playa, tomar el sol, leer, correr sobre la vieja pista de tierra o tomarse unas cervezas viendo un partido de rugby. (Avenida Juan Herrera, s/n).

9. Biblioteca de ETSAM. Mi vida de estudiante en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura la pasé dentro de su biblioteca. Es maravillosa. Acostumbraba a pasar días enteros husmeando sus libros y revistas. Puedo decir que me la conozco de memoria (Avenida Juan de Herrera, 4).

10. Cerro del tío Pío. Quizá sea el único sitio desde donde poder ver la ciudad en toda su plenitud con unas cervezas en la mano mientras el sol se esconde y desaparece. (Puente de Vallecas).