Gómez promete que el tiempo máximo en urgencias será de 4 horas

Que el tiempo máximo entre el ingreso y el alta en Urgencias hospitalarias sea, como mínimo para nueve de cada diez pacientes, de cuatro horas, y que los hospitales funcionen con horario de mañana y tarde, tanto para actividad quirúrgica como para pruebas diagnósticas y consultas, son algunos de los compromisos que el secretario general del PSOE de Madrid y candidato a la presidencia de la Comunidad, Tomás Gómez, ha desgranado hoy antes de visitar las instalaciones del Severo Ochoa de Leganés.

Acompañado por el secretario general del PSOE de Leganés y candidato a la alcaldía de esta ciudad, Santiago Llorente, y por miembros del PSM, entre ellos la secretaria de Sanidad, Laura Oliva, Tomás Gómez ha planteado medidas para eliminar el actual “colapso” de las urgencias en los hospitales de la región, consecuencia de “los recortes y la falta de recursos y profesionales”. En definitiva, fruto del “castigo del Gobierno de la Comunidad de Madrid”, dijo.

En el caso del Severo Ochoa, explicaba Gómez, las urgencias han sobrepasado las 90 personas cuando su capacidad actual es de 69 pacientes. Por ello, el también portavoz socialista en la Asamblea de Madrid, recalcaba que estos servicios se deben organizar “más médicos y más recursos para que los ciudadanos puedan tener mejor atención”.

Así, además de comprometer que a partir de mayo de 2015 el tiempo máximo en urgencias sea de cuatro horas desde que un paciente ingresa hasta que recibe el alta, Gómez ha subrayado la importancia de utilizar los hospitales en horario vespertino para no dejar infrautilizadas estas infraestructuras. “¿Por qué hay que derivar a un hospital privado cuando un hospital público puede hacerlo? ¿Por qué un hospital por la tarde no puede hacer pruebas diagnósticas y abrir consultas a todos los ciudadanos?”, preguntaba el líder del PSM antes de señalar que ésta no es una cuestión de recursos sino de una “mejor organización”.

Asimismo, incluye implementar una Red de Hospitales de Media y Larga Estancia para aquellos pacientes que no pueden ser atendidos en su domicilio, pero no requieren estar en un hospital general de agudos; por aumentar la transparencia y simplificación de quejas y reclamaciones; y por despolitizar el nombramiento de los cargos directivos que pasarán a ser elegidos mediante convocatoria pública para garantizar la profesionalidad, la independencia y la excelencia en la función directiva de la Sanidad Pública.