Los Reyes Magos pinchan en Ourense

Las modernas formas de transporte compartido han llegado este año a la cabalgata real de Ourense. Pero a la fuerza. Melchor, Gaspar y Baltasar han acabado compartiendo carroza, sentados sobre los reposabrazos del trono, tras los sucesivos pinchazos que inutilizaron prácticamente todos las vehículos que les trasladaban desde la estación de ferrocarril hasta la Plaza Maior ourensana. Pinchazos y reventones de todo tipo en unas modernas carrozas diseñadas especialmente para la visita de Sus Majestades que, sin embargo, empezaron nada más arrancar. Melchor y Gaspar fueron los primeros en compartir carroza tras un inoportuno reventón. A los pocos metros, los dos Reyes tuvieron que subirse al carruaje de Baltasar tras volver a pinchar.

Solo los vecinos y niños del barrio de A Ponte, en la orilla derecha del río Miño, pudieron disfrutar del mágico espectáculo sin incidentes, ya que poco antes de llegar al Puente Romano los problemas y los parones empezaron a crecer casi al mismo tiempo que la indignación de los ourensanos que esperaban, impacientes, por las calles del recorrido, al otro lado del río, en dónde se concentra la mayor parte de la población de la tercera ciudad de Galicia. Finalmente fueron necesarias más de tres horas para que la comitiva real recorriese los dos kilómetros que separan la estación de la zona antigua de la ciudad, en dónde se encuentra la Plaza Maior.

Tras los sucesivos pinchazos y ante la posibilidad de que la única carroza que resistió los infortunios llegase al Ayuntamiento, la organización llegó a barajar la posibilidad de que Sus Majestades hiciesen el recorrido a pie. Finalmente no fue necesario gracias a la ayuda de los pajes reales y los miembros de Protección Civil que vigilaban los bajos de los vehículos durante el recorrido. El Gobierno local (PSdeG-PSOE) publicitó durante los últimos días un espectáculo con 300 intérpretes y cinco carrozas autopropulsadas, las primeras de Galicia sin tracción externa, “pensadas y diseñadas, técnica y artísticamente en exclusiva para Ourense”. El pinchazo organizativo no ha impedido que finalmente los Reyes Magos y su séquito llegasen al Ayuntamiento para saludar a los ilusionados pequeños y a los incrédulos padres.

Tras finalizar la cabalgata, el gobierno local pidió disculpas a la ciudadanía por el retraso a través de un comunicado y anunció que la empresa encargada de confeccionar las carrozas de Sus Majestades ha asumido la responsabilidad de la avería. La edil de Cultura, Ana Garrido, asegura que “fue una lástima que los Reyes no habían querido emplear su magia para resolverlo de inmediato. Optaron por viajar juntos y llegar en una misma carroza donde cientos de niños y niñas los recibieron con las sonrisas que sus majestades merecen en este día que nunca olvidarán”.