El debate soberanista dinamita el pacto entre CiU y PP en Reus
El alcalde Carles Pellicer basa la decisión en "el menosprecio" de los populares al proceso
Convergència i Unió (CiU) rompió ayer su pacto de gobierno con el PP en el Ayuntamiento de Reus (Baix Camp). El alcalde, Carles Pellicer, aseguró que tomó la decisión por la actitud del PP a nivel nacional después de la celebración de la consulta sobre la independencia de Cataluña del domingo. “La realidad municipal ha coincidido con un momento trascendental sobre el futuro político de Cataluña. Se han traspasado las líneas rojas del menosprecio con medidas y actitudes inaceptables”, dijo Pellicer, que aseguró que el Gobierno central lleva a cabo un “ataque a Cataluña" y una “afrenta” al presidente de la Generalitat, Artur Mas.
Los convergentes, con diez concejales, tratarán de gobernar en minoría hasta las próximas elecciones y ya están trabajando en un nuevo reparto de carteras. El PP, con seis ediles, estaba valorando estas últimas semanas dinamitar el pacto de gobierno local, según diversas fuentes. Pellicer mantuvo ayer por la noche un encuentro en el Consistorio con el resto de concejales convergentes y después se dirigieron unidos a comunicar la decisión a las ejecutivas locales de la federación, que recibieron el anuncio con aplausos.
Agradecimiento
El alcalde agradeció al PP la travesía realizada juntos hasta ayer, iniciada cuando en 2011 pactaron para desalojaran del poder al PSC. Los socialistas gobernaron Reus durante las tres décadas anteriores. “Juntos hemos gestionado la ciudad en unos momentos que no son nada fáciles. Siempre hemos dicho que este era un pacto de gestión, conscientes de las diferencias ideológicas que nos separan”, indicó el alcalde.
No obstante, Pellicer y la ya ex primera teniente de alcalde, Alicia Alegret (PP), habían protagonizado numerosos desencuentros en parte debido al soberanismo. “Los cargos públicos lo somos 24 horas", arengó le alcalde en junio cuando la Cámara de Comercio hizo público que Alegret les había enviado una carta recriminando un hipotético soberanismo del ente y amenazando con retirarles por este motivo el apoyo. Pellicer tuvo que intervenir para calmar las aguas entre la Cámara de Comercio y la primera teniente de alcalde, que tenía bajo su cargo la cartera de Promoción Económica.
En octubre de 2012 Alegret preguntó públicamente durante un pleno al alcalde si quería romper el pacto. "Usted que hoy ha hecho bandera del derecho a decidir, yo le doy este derecho a decidir. Decida si quiere seguir con nosotros y si nos mantenemos centrados en los retos de ciudad", remachó Alegret.
La oposición, formada por el PSC, Ara Reus y la CUP, cuestionó desde el primer día el acuerdo entre la federación nacionalista y los populares. El Gobierno local tuvo que lidiar prácticamente desde que se inició el actual mandato con las investigaciones judiciales del caso Innova. Este se centra en presuntas irregularidades halladas en el extinto holding de empresas municipales de la ciudad.
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