Escotet sacará Abanca a Bolsa pero se quedará con el 80% del capital

Superado con holgura el test de estrés al que fueron sometidas las entidades bancarias de toda la zona euro, los nuevos dueños y gestores de Abanca destilan optimismo. Hasta septiembre, los beneficios netos de la entidad ascendieron a 342,5 millones de euros y su índice de morosidad, aunque sigue siendo muy alto, como en todo el sector, se redujo del 17,6% al 13,8%. “Este va a ser un muy buen ejercicio”, proclamaron ayer el vicepresidente y propietario de la entidad, Juan Carlos Escotet, y su consejero delegado, Francisco Botas, quienes presentaron los resultados en Santiago. Escotet mantiene el plan de sacar Abanca a Bolsa en un plazo de “tres o cuatro años”, pero manteniendo la mayoría del capital.

 El beneficio en los tres primeros trimestres quintuplica el del mismo periodo de 2013 —61 millones de euros entonces— aunque este año la entidad ha tenido ingresos extraordinarios. Su cuota de mercado en Galicia ha crecido ligeramente, según Botas y Escotet, y se sitúa en un 30,1% del crédito total y del 37,6% de los depósitos. Según ambos ejecutivos, el crédito ha experimentado este año un avance hasta sumar un total de 4.500 millones de euros. Los depósitos minoristas aumentaron en 1.062 millones y alcanzan ahora 25.114 millones. Botas destacó especialmente que la entidad ya tiene más depósitos que crédito, en contra de lo que sucedía en la antigua Novacaixagalicia, comprada por Escotet, al frente del grupo venezolano Banesco, el pasado diciembre, en la subasta organizada por el FROB. El banco nacido de las antiguas cajas gallegas fue vendido por 1.000 millones de euros después de haber sido saneado con 9.000 millones de capital aportados por el Estado.

Abanca figura ahora en el puesto 64º del total de entidades bancarias europeas, y sus índices de solvencia y liquidez, según aseguran los directivos, los sitúan a la cabeza de España. Su ratio de capital, subrayaron, ha mejorado sustancialmente al pasar del 10,23% al 12,8% y también ha crecido el margen comercial. “Somos una entidad dinámica, sólida y solvente, centrada en sus clientes y en la banca tradicional y responsable”, señaló Botas.

El plan de los actuales gestores es buscar nuevo capital en un plazo de unos tres años, cuando prevén que Abanca salga a Bolsa. Pero Banesco, que ahora controla el 92% del capital, pretende seguir manteniendo una posición claramente mayoritaria, con alrededor de un 80%, después de que se abra al mercado bursátil, explicó Escotet.

El optimismo de los directivos de Abanca también se traslada a la situación económica general. “No tenemos dudas sobre la recuperación”, señaló Escotet. “Nos lo trasladan todos los clientes con los que hablamos. En todos los sectores nos dicen que hay crecimientos del 2%”. Tampoco la situación política inquieta de forma especial al banquero hispano-venezolano, porque en España hay “un orden institucional que funciona perfectamente”. Preguntado por las opiniones que advierten de que España podría derivar en una situación como la de Venezuela, sentenció: “No creo que quepan comparaciones entre ambos países”.