Los excesos de velocidad del metro no llegaban al comité de seguridad

El ex director técnico de Ferrocarrils de la Generalitat (FGV) Francisco García Sigüenza, uno de los tres imputados por el accidente de metro de Valencia en 2006, reconoció ayer ante la juez que los excesos de velocidad de los maquinistas del metro —la primera instrucción judicial concluyó que fue la causa del accidente de 2006— nunca se trataron en el comité de seguridad de FGV y su departamento tampoco se encargaba de investigarlos. De las infracciones de los maquinistas se ocupaba el jefe de línea, no el comité de seguridad, declaró ante la juez instructora Nieves Molina.

El exdirectivo explicó que los rebases de señales semafóricas de los maquinistas aconsejó buscar sistemas de seguridad ad hoc y, en su día, se consideró más idóneo instaurar en la línea 1 del metro el sistema de frenado FAP. Según la asociación de víctimas AVM3J, desde FGV “eran conscientes de que había que evitar los descuidos o malas prácticas de los conductores, pero no hicieron nada por mejorar el sistema FAP”. No protegieron las señales de limitación de velocidad, “dejando a la pericia del maquinista la seguridad de la línea 1”.

García Sigüenza sí reconoció, por el contrario, que tras el accidente, donde murieron 43 viajeros, se colocó una baliza ex profeso para proteger la curva donde descarriló el metro y que el ATP, un sistema de frenado automatizado, se licitó en 2007 y acabó de implantarse en la línea 1 en 2010. Está instalado entre las estaciones de Empalme y Torrent-Avinguda.

Sigüenza, segundo imputado en declarar tras la comparecencia el pasado viernes de Francisco Orts, no contestó a las preguntas de las acusaciones particulares, solo a las de la juez, la fiscal y la Abogacía de la Generalitat. “Lamentamos el silencio del señor Sigüenza, el cual impide conocer la verdad en muchos aspectos”, criticó la AVM3J.

Mañana miércoles está previsto que declare el tercer exdirectivo imputado en la causa. Es Vicente Contreras, jefe de explotación cuando el convoy descarriló en julio de 2006.