Feijóo: “Hay rutas escolares que cuestan 4.200 euros por alumno”

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se ha quejado esta mañana en el Parlamento gallego de la escasa financiación que recibe la comunidad por parte del Estado para sufragar el sobrecoste de los servicios públicos que supone la dispersión poblacional de Galicia. Lo hizo cuando el BNG le pidió su opinión sobre la revisión de esa financiación autonómica, que habría que abordar antes de fin de año pero que el Gobierno central ha anunciado que retrasará. Feijóo cargó contra el sistema existente, aprobado en 2009 por el Gobierno socialista, pero eludió reclamar al actual Ejecutivo que agilice su reforma, como le pidió el BNG.

Feijóo indicó que la dispersión poblacional de Galicia le supone “500 millones de sobrecoste de la sanidad” y aseguró que hay rutas de transporte escolar que “cuestan 4.200 euros por alumno”, gastos que no se cubren adecuadamente con los fondos que recibe de Madrid. “Sigo pensando que ese sistema de financiación no es bueno para Galicia ni es bueno para España”, dijo Feijóo del acuerdo alcanzado en 2009, que entonces aceptó, según argumentó, para no tener que devolver de golpe sino a plazos 1.600 millones de liquidaciones de los años 2008 y 2009 mal realizadas por el Gobierno socialista.

Fue el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, el que indicó que con el actual sistema de financiación Galicia recibirá en 2015 algo más de 6.000 millones de euros, 1.300 millones menos que en 2008. Jorquera recordó a Feijóo que el sistema debe revisarse “cada cinco años”, plazo que se cumple en diciembre pero que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ya ha anunciado que no cumplirá. “El Gobierno español está incumpliendo la ley y usted lo acepta”, criticó el nacionalista, que reclamó insistentemente y sin éxito que Feijóo valorase ese retraso. El presidente optó por criticar el sistema actual y acusar al anterior Ejecutivo socialista, pero eludió reclamar al Gobierno que apure su reforma y se limitó a destacar que la Xunta está recabando datos y argumentos con los que lograr que se atiendan los sobrecostes de la dispersión poblacional.

En la misma sesión parlamentaria de control al Gobierno, el presidente anunció que mañana la Xunta aprobará un plan para fomentar las exportaciones y la internacionalización de la economía gallega. Lo hizo ante la pregunta del portavoz del PSOE, José Luis Méndez Romeu, sobre la expresión “raíces vigorosas” empleada por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para referirse a la mejoría económica. Feijóo admitió que “aún venciendo la recesión, no vencimos la crisis” y que la recuperación es todavía “débil” y “tímida”. Cuando hace un mes y medio la Xunta aprobó el techo de gasto para el año próximo ya admitió que fía al buen comportamiento de las exportaciones más de la mitad del crecimiento económico de un 1,8% del PIB que prevé para 2015. Entonces ya era conocido un informe de la Zona Franca de Vigo que alerta de que ese “motor de la recuperación” se ha frenado en los primeros meses de este año. Las previsiones económicas moderadas de la Xunta, en línea con la alerta de un posible parón lanzada por el ministro de Economía, Luis de Guindos, contrastan con el pronóstico realizado esta misma semana por el presidente de la patronal gallega, José Manuel Fernández Alvariño, de que el PIB podría crecer el próximo año entre un 2,4% y un 2,7%.

La sesión de control al Gobierno sirvió para que la viceportavoz de AGE, Yolanda Díaz, reprochase a la Xunta el incremento de la deuda pública autonómica en los últimos cinco años de 3.900 a 10.000 millones. “¿Para qué se endeudó usted, para pagar gasto corriente?”, preguntó Díaz a Feijóo. “Usted en la empresa privada estaría despedido”, le dijo. El presidente le contestó criticando que en sus enmiendas a los presupuestos autonómicos de este año AGE propusiese “incrementar la deuda pública” aún más para mejorar los servicios sociales y aseguró que Galicia es “la única que no necesita dinero del Estado para llegar a fin de mes”.