Can Vies logra en Internet 70.000 euros para volver a levantar el centro social

A su ritmo y haciendo ruido solo cuando les interesa, el colectivo de Can Vies ha logrado ganar una nueva batalla y ha conseguido 1.746 donaciones por valor de 70.000 euros gracias al micromecenazgo organizado desde la plataforma de internet Verkami. Un 30% de este dinero lo destinarán “a pagar los procesos judiciales” que tendrán que afrontar para defender a los detenidos durante los disturbios y el 70% restante lo utilizarán para comprar material para rehabilitar la finca. La mano de obra quedará en manos de los voluntarios, que hasta ahora han respondido a todas las llamadas.

Desde que estalló el conflicto de Can Vies, los okupas han organizado jornadas de trabajo semanalmente para limpiar los escombros que quedaron cuando Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) intentó derribar el centro social, ejecutando una orden judicial. El plan del Ayuntamiento quedó frustrado al día siguiente cuando los okupas prendieron fuego a la máquina excavadora y durante una semana los disturbios pusieron contra las cuerdas a la administración local que terminó cediendo. El alcalde Xavier Trias ordenó la paralización del derribo, autorizó a los okupas a volver a levantar la finca e incluso financió a los técnicos para que dieran garantías de que la estructura del inmueble no había quedado dañada tras pasar todo un día encajando los golpes de la excavadora.

“La estructura está en perfecto estado”, aseguró ayer una portavoz del movimiento. En las próximas asambleas tienen que decidir “qué actividades se organizarán a dentro” y también si pedirán una licencia de obras antes de empezar la remodelación. En medio de toda la tensión, el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Joaquim Forn, se comprometió a estudiarla y aceptarla si cumplía con los requisitos necesarios.

La noticia de que habían llegado a los 70.000 euros de Verkami la conocieron el martes por y fueron a brindar a la puerta de la sede del distrito de Sants- Montjuïc, donde se estaba celebrando una Audiencia Pública.

Más allá de la limpieza del espacio, las obras de reconstrucción todavía se harán esperar, según fuentes del colectivo. La cesión que aprobó el alcalde Xavier Trias —en unos de sus pasos atrás más escandalosos de su gobierno— es durante dos años.

Una vez finalizado este periodo el alcalde que esté al mando tendrá que tomar la decisión de volver a destapar la caja de los truenos y desalojar al nuevo Can Vies o buscar una alternativa. El desalojo de Can Vies —tras casi una década de procesos judiciales— se tiró adelante porque el espacio estaba afectado por la construcción del cajón de casi 800 metros de largo que tiene cubrir las vías del tren en Sants.

La obra de cobertura está dividida en tres fases: la primera, que terminará en septiembre, es la que afecta al lado montaña de las vías. La segunda, que se adjudicará hoy mismo, es la que prevé la urbanización de la gran losa que cubrirá las vías en la banda mar. Fuentes municipales aseguraron ayer que esta obra no afecta para nada a la finca de Can Vies, que se verá afectada en la tercera fase.

En el momento de ordenar el desalojo de la finca de Can Vies, el Ayuntamiento argumentaba que era necesario también el derribo del inmueble para poder realizar los trabajos de la cobertura. Tras hacer marcha atrás en su intención de derribar la finca, la versión municipal es que, de momento, Can Vies no afecta para nada al desarrollo de las obras.

Según el proyecto, una parte de Can Vies se ve afectada por una de las rampas de acceso a la futura plataforma que cubrirá las vías. Otra parte está destinada a zona verde, según fuentes municipales.