Fabra reúne al Consell para revisar tácticas y recuperar la iniciativa

El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, convocó ayer a su Gabinete a una reunión de trabajo privada para empezar a planear ya la estrategia del último año de legislatura y recuperar la iniciativa. Un curso que es vital para el PP, a quien los sondeos ahora le auguran una pérdida de la mayoría absoluta que le impediría revalidar el Gobierno en mayo de 2015.

Durante la larga sesión de trabajo en el Palau de la Generalitat, que empezó a las diez de la mañana y se prolongó hasta la sobremesa, los consejeros se ratificaron en la idea de no aplicar los recortes adicionales que exige el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.

Fuentes conocedoras de la reunión indicaron que tanto Fabra, como su consejero de Hacienda, Juan Carlos Moragues, dieron cuenta de las conversaciones mantenidas con el Gobierno y el Ministerio de Hacienda, que ya sabe que el Plan Económico Financiero (PEV) —que remitirá la Generalitat este mismo mes a Madrid— de seguimiento del objetivo de déficit (1%) no incluye ninguna nueva reducción del gasto previsto en 2014 y cuadra las columnas del debe y el haber con una aportación adicional del Estado cercana a los 1.000 millones de euros.

El Ministerio de Hacienda, pese a su negativa a abrir la negociación sobre la reforma del sistema de financiación, ha empezado a estudiar fórmulas que puedan aplacar el malestar del Consell. El principal escollo está en encontrar una fórmula que permita paliar la situación de las autonomías más agraviadas sin que, con los mismos argumentos, empiecen a presionar otros territorios o se creen nuevos agravios. Durante la reunión, los consejeros se quejaron de las enormes dificultades que entraña impulsar nuevas iniciativas sin apenas soporte financiero aunque se comprometieron a empezar a cerrar nuevas propuestas para que el presidente de la Generalitat las pueda presentar en el debate de política general que tendrá lugar en las Cortes a final de septiembre.

En la reunión del Consell también se realizó un amplio análisis electoral. Para la mayoría de consejeros, el argumento del miedo a un posible Gobierno tripartito de izquierdas puede revelarse insuficiente para mantener la mayoría absoluta. En ese contexto, los miembros del Gabinete plantearon la necesidad de ilusionar al electorado popular y no solo animarlo a votar por resignación o miedo al tripartito.

Así, Fabra instó a su Gabinete a acabar con la imagen de inactividad que parece lastrar al Consell y mejorar la coordinación interna y la comunicación externa. El presidente quiere trasladar una imagen distinta, de confianza y cercanía a los ciudadanos, con un discurso de regeneración y lucha contra la corrupción. Una idea que se plasmará ya en los ejes de reforma estatutaria que el PP planteará en las Cortes el próximo día 17.