La atención de la Cruz Roja a niños vulnerables sube un 37% en Barcelona
La ONG ayudó a 20.500 personas a cubrir sus necesidades básicas en 2013
La Cruz Roja se unió ayer a las voces que alertan sobre la vulnerabilidad de la infancia en el contexto actual de crisis. La ONG presentó ayer su memoria de actividades del año pasado, donde explica que en 2013 atendió 1.035 menores vulnerables, un 37% más que en 2012, sobre todo con ayudas para la alimentación. Un 20% del total de los asistidos (20.500 personas) recibieron ayudas para cubrir sus necesidades básicas.
Josep Marquès, el presidente de la entidad en Cataluña y Barcelona, explicó que los programas de la ONG llegaron a 100.232 personas, incluyendo las actividades de salud, socorro, promoción de valores y cooperación internacional. Se trata de un aumento del 26% con respecto al año anterior.
Cifras por actividad
El programa de alimentos de la Cruz Roja llegó a 11.269 personas.
Se entregaron 2.394 kits de apoyo social a igual número de familias.
2.148 'sin techo' recibieron ayuda en 2013.
La Cruz Roja tiene 2.297 voluntarios.
Si bien los programas para atender a los adultos mayores siguen siendo los más extendidos, Marquès llamó la atención sobre el incremento de casi un 40% en proyectos orientados a la niñez en situación de vulnerabilidad y que en muchos casos no tienen una correcta alimentación garantizada. A esto se suma que uno de cada cinco del total de beneficiarios recibió apoyo para cubrir sus necesidades básicas, como comida, productos de higiene y atención sanitaria. A finales del año pasado, se abrió el centro de distribución de ropa y calzado en la calle del Bou de Sant Pere.
La Cruz Roja invirtió en estos proyectos de lucha contra la pobreza más de un millón de euros, el 35% de los cuales procedieron de fondos propios. De cada 100 euros gastados por la Cruz Roja, 6,36 se destinaron a la lucha contra la exclusión social y la infancia con dificultades sociales.
La ONG también ayudó a 498 personas que participaron en programas para promover la recuperación de su autonomía económica y personal a medio y largo plazo. Estos programas tienen una tasa de inserción laboral del 34%.
“Nosotros hacemos cosas porque estamos para ayudar, es nuestra misión y para eso existe la Cruz Roja. Si la Administración pudiera llegar un poco más allá, nosotros no tendríamos que hacerlo tanto”, dijo Marquès, que instó a afinar el alcance y priorización de los servicios sociales municipales y de la Generalitat. La ONG aumentó en un 10% el número de socios el año pasado.
El pasado mayo, la Cruz Roja presentó el programa Aliança Humanitària per a l’Alimentació Infantil, que busca recaudar un millón de euros en este 2014 para dedicarlo exclusivamente a la alimentación de los más pequeños. Hasta el momento se han recaudado 127.000 euros.
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