Las Ventas, para conciertos
La cantante se declara antitaurina y plantea mantener la plaza solo para espectáculos
1. Libertad 8. Es una de las primeras salas donde empecé a tocar, aunque la primera vez que me subí a un escenario fue en el Montacargas, que ahora es una sala de teatro alternativo. Pero descubrir Libertad 8 fue muy especial para mí, supuso conocer a gente que sentía lo mismo que yo, pasión por la canción de autor. Aquello parecía el bar de Friends. (Calle de Libertad, 8)
2. Calle Regueros. En esta calle, entre Alonso Martínez y Chueca, he pasado los mejores años de mi vida. Allí está el Búho Real, otra de las primeras salas en las que empecé a tocar, y justo al lado el Pulccinella, uno de mis restaurantes favoritos. Viví justo encima del Búho durante tres años, en un estudio de 30 metros cuadrados. (Calle Regueros, 5 y 7)
3. Parque Quinta de los Molinos. La primera vez que fui estaban todos los cerezos en flor… y aluciné. Está ahí, en medio de Madrid, en plena calle Alcalá, y es como entrar en otro universo. (Calle Alcalá , 527-531)
4. Tienda de guitarras Head & Banger. Mi amigo Tom's Cabin daba un concierto allí y me invitó. Desde entonces vengo mucho porque el espacio es alucinante, hacen conciertos gratuitos cada mes y las guitarras son muy especiales, piezas descatalogadas, ediciones limitadas… aunque yo, para decidirme por una, necesito que me enamore. Llevo un tiempo detrás de una eléctrica, tal vez me la compre aquí. (Calle la Palma, 73)
5. La Croquetería. Se especializan en croquetas de todo tipo, las clásicas de siempre y otras rarísimas, como una de morcilla con mango. Está riquísimo, es asequible, y al estar cerca de Atocha es un lugar perfecto para llevar a gente de fuera y compartir una noche con amigos. (Paseo de santa Maria de la Cabeza, 38)
6. Tienda Enfant Terrible (Nuñez de Balboa, 30). Es un espacio de coworking para nuevos diseñadores, una tienda muy estilosa donde alquilas una parte para vender lo que estés haciendo, desde ropa, sombreros, jabones, joyería… Algunos creadores están fijos y otros van rotando.
7. Café de Belén. Otro lugar precioso, muy acogedor, con luz tenue y buena carta de cafés, infusiones y copas. Abre a las seis de la tarde, genial para reunirse antes de salir. Siempre que voy me tomo un té frio de hierbabuena. (Calle de Belén, 5)
8. Sala Galileo. He perdido la cuenta de las veces que he tocado allí, pero no por eso deja de ponerme nerviosa el concierto del próximo viernes. Es una de las salas que mejor suena de Madrid y tiene el aforo perfecto, unas 500 personas. (Calle de Galileo, 100)
9. Creperie Breizh. Una crepería en pleno corazón de Malasaña donde los crepes son de los buenos, típicos de Bretaña, y el servicio es excelente. Además de crepes salados y dulces tienen unas hamburguesas buenísimas. (Calle Madera, 36)
10. Las Ventas. ¡Ojo, que soy antitaurina, y mucho! Pero mantendría la plaza de toros de Las Ventas solo para conciertos. En 2009 tuve la suerte de tocar con Los Secretos la canción Otra tarde, y estaban por allí Sabina, Miguel Ríos… y yo solo pensaba, "¿qué pinto aquí? La visión de Las Ventas llena desde el escenario, tan redonda, como si el público me abrazase. Nunca lo olvidaré.
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