El Himalaya, a dos pasos del centro de Valencia

El Museu d'Etnologia de Valencia muestra por primera vez en España la colección más amplia del Reino de Bután existente en Europa, con fotografías realizadas por el valenciano Óscar Catalán y objetos cedidos por el propio rey del país asiático, Jigme Dorki Wangchuck, al Museo de Etnografía de Neuchâtel (Suiza) a finales de los años 60 del siglo pasado.

Las fotografías de la exposición Almas. Fotografíes de Oscar Catalán ponen imagen a los objetos y conceptos expuestos en Himàlaia, la gran muestra procedente del museo suizo. La diputada de Cultura, María Jesús Puchalt, ha presentado este jueves en La Beneficència ambas exposiciones organizadas por el Museu Valencià d'Etnología, que podrán visitarse hasta el próximo 9 de noviembre.

Al acto también han asistido el director del Museu Valencià d'Etnologia, Joan Seguí; el director del Musée d'Ethnographie de Neuchâtel (MEN), Marc-Olivier Gonseth, y el fotógrafo Oscar Catalán. Las exposiciones se enmarcan en la línea de producciones expositivas con museos internacionales que aborda la alteridad y la diversidad cultural, ha subrayado Puchalt.

"Para los europeos el Himalaya es un lugar de referencia mítica, de profunda espiritualidad y por ello la Diputación de Valencia exhibe ambas muestras que pretenden profundizar en su significado", ha comentado.

Joan Seguí ha explicado que la exposición sobre Himalaya muestra también veinticinco budas conservados en el MEN procedentes de una colección privada y ha incidido en que es la primera vez que estas colecciones suizas se exhiben en España.

"La exposición revela una aproximación al sujeto marca MEN, esto es, utilizando la museografía crítica, denominada también de la ruptura, de una intensidad inusual que ofrece una perspectiva caleidoscópica sobre la zona que permitirán al visitante descubrir diversos Himalayas", ha apuntado.

Marc-Olivier Gonseth ha elogiado la adaptación expositiva realizada por el museo de la Diputación "por su sentido riguroso, lúdico, crítico y muy logrado estéticamente". En este sentido, destaca la pintura a gran escala realizada expresamente para la ocasión por Adrià Pina sobre las paredes del primer espacio de la exposición para recrear las míticas montañas.

A partir los objetos procedentes del museo suizo, que datan los siglos XII al XXI, el museo valenciano plantea una museografía en la que el objeto "exótico" forma sólo una parte de las visiones sobre el Himalaya. Esas visiones se completan con la presencia de otros objetos como material de montaña, objetos de inspiración budista, libros y alimentos, que alimentan el caleidoscopio de significados sugerido por el director del Museu Valencià d'Etnologia.

La exposición del MEN se completa con una muestra de fotografías en la que los objetivos toman vida. "No es lo mismo ver el cuenco en la vitrina que comprobar cómo un monje lo toma entre sus manos", ha comentado Catalán, quien también ha hablado sobre la dificultad, técnica y física, que acompaña a este tipo de trabajos.

Catalán realizó varios viajes al Himalaya en 2011, 2012 y parte de 2013 para tomar las fotografías que componen la exposición y ha relatado que tuvieron que ser rescatados tras quedar atrapados en un collado a gran altura, sufrieron de mal de altura y en un ocasión, coincidieron con el levantamiento de un estado de sitio por un problema religioso.