Más radio en Cataluña, pero con menos publicidad y empleados que en 2007

La radio en Cataluña ha aguantado la crisis de audiencia de los medios tradicionales de comunicación y ha ganado un 13,5% de penetración desde 2007. Sin embargo, la publicidad y los empleos en el sector siguen cayendo en picado. Estas son las cifras que se desprenden del informe anual de la Asociación Catalana de la Radio (ACR), correspondiente a 2013 y realizado por la consultora Media Hotline.

Tres de cada cuatro oyentes de radio en Cataluña (un total de cuatro millones) escucha emisoras en catalán, asegura el informe presentado ayer. El 75% sintoniza estaciones de ACR, que agrupa a las emisoras comerciales privadas que operan en el territorio catalán. Hay unas 755 frecuencias en FM, según el informe. Unas 115 son piratas ya que funcionan sin la correspondiente autorización.

Si bien la penetración de la radio ha caído a comparación del año pasado —1,6 puntos—, el saldo de la serie de siete años es positivo. En 2007, la penetración de la radio era del 55,6% y el año pasado fue de 63,1%. Esto hace que Internet y la radio sean los únicos medios que han crecido de forma significativa (29,7 y 7,5 puntos, respectivamente). La televisión solo ha logrado ganar dos puntos, mientras que las revistas, los diarios, los suplementos dominicales y el cine suman importantes bajadas.

El sector de la radio también continúa destruyendo puestos de trabajo. De hecho, el recorte del año pasado ha sido el más grande desde que comenzó la crisis, con un 31% menos de puesto de trabajo, pasando de 779 a 594. Desde 2008, primer año en que comenzó la medición de este indicador, se han perdido casi la mitad de empleados y colaboradores, pasando de 1091 a 594.

La publicidad, por su parte, cae por sexto año consecutivo, según revela el informe. Se trata de una rebaja del 43% desde el inicio de la crisis. En 2007, las emisoras catalanas ingresaban unos 75,3 millones de euros por este concepto y el año pasado esta suma supero ligeramente los 43 millones. La reducción interanual ha sido del 4,7%, unos 2,1 millones de euros menos. Estas cifras contrastan con la pérdida de publicidad en el conjunto del Estado, que dobló el porcentaje, llegando a más de diez puntos menos.