Urkullu ve una “oportunidad” para resolver la cuestión vasca

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha considerado que la abdicación del rey Juan Carlos abre una “oportunidad” para tratar de resolver la “cuestión vasca” y de encontrar un nuevo encaje de Euskadi en el Estado. Durante la inauguración de la Bienal de la Máquina-Herramienta en el Bilbao Exhibition Center (BEC) de Barakaldo (Bizkaia), el presidente del Gobierno vasco ha señalado que el próximo relevo en la jefatura del Estado “es una oportunidad para la actualización de los derechos históricos vascos a través de la vía del binomio reconocimiento de los derechos históricos y pacto con la Corona”, informa Pedro Gorospe. A su vez, Urkullu ha mostrado su “total disposición” a colaborar “en este tiempo nuevo que se abre para profundizar en la democracia, la libertad y la convivencia”.

Esta respuesta se ha producido horas después de que en una entrevista en la cadena SER el lehendakari reclamara que en el actual contexto político defiende una “bilateralidad efectiva” con el Gobierno español para que “nadie pueda laminar” el Estatuto de Gernika e “incumplirlo de manera unilateral, como es el caso”.

Urkullu acompañó el pasado 19 de mayo al rey Juan Carlos en su visita a la planta Mercedes Benz de Vitoria, la mayor factoría de Euskadi, que da empleo a 3.500 operarios y suministra carga de trabajo para otros 10.000 de otras empresas. Días antes, el lehendakari, al igual que otros destacados representantes del PNV, se había mostrado partidario de la República.

No obstante, el Rey y su hijo mantenían una estrecha relación con el entonces alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna. Don Felipe, de hecho, asistió al funeral del edil nacionalista y el Rey le visitó unos días antes con motivo de su presencia en la Cumbre Económica que se celebró en la capital vizcaína el pasado 3 de marzo.

El Rey visitó el 19 de mayo la planta Mercedes Benz, en Vitoria

La presentación de los nuevos modelos de Mercedes Benz, en los que se ha destinado una inversión de 190 millones de euros, supuso la vuelta del Monarca 18 años después de su anterior visita.

La izquierda soberanista aprovechó la llegada del Rey para convocar una concentración de protesta en Vitoria, que encabezó el diputado de Amaiur Sabino Cuadra, mientras el sindicato abertzale LAB se concentró frente a la planta de Mercedes en Vitoria.

Un día antes, cinco representantes de EH Bildu interrumpieron el inicio de un acto en el teatro Arriaga de Bilbao presidido por el Príncipe de Asturias, a quien también acompañaba el lehendakari. Mostraron camisetas en contra de la monarquía y silbaron a los asistentes a la entrega de premios de la Fundación Novia Salcedo. Don Felipe había iniciado esta jornada con un almuerzo de trabajo invitado por el Círculo Vasco de Empresarios.

Al anuncio de la abdicación del Rey apenas han respondido los partidos políticos vascos. Mediante una escueta nota, el PSE-EE expresa su respeto ante la decisión y añade que "pese a no ser la monarquía nuestro sistema de gobierno preferido, los socialistas valoramos el papel desempeñado por don Juan Carlos en la recuperación y mantenimiento de la democracia en nuestro país durante los años de su reinado". Y añaden: "Esperamos que su sucesor sepa renovar la confianza de la ciudadanía en la institución y la ponga al servicio de una España social y democrática".

Ezker Batua Berdeak, por su parte, ha mostrado su deseo de que se dé paso a “un referéndum sobre la jefatura del Estado” y no a la “continuidad monárquica, sin preguntarle al pueblo, casi 40 años después, por quién quiere regirse”.

A su vez, desde la izquierda abertzale, Alternatiba, uno de sus partidos miembros, ha denunciado la “operación estética” que, en su opinión, supone la abdicación de don Juan Carlos en un momento muy concreto en el que “las formaciones políticas que sustentan un régimen bipartidista en descomposición sufren una crisis constatada por los resultados electorales del pasado 25 de mayo”.