Podemos aprovecha la división de IU para irrumpir en su feudo de Rivas

Podemos, un partido con apenas cuatro meses de vida encabezado por un profesor treinteañero de Ciencias Políticas, se cobró el domingo Rivas-Vaciamadrid, el principal Ayuntamiento de Izquierda Unida de los 160 que gestiona en España. El zarpazo de Pablo Iglesias, que capitalizó el derrumbe municipal del PSOE y gripó las posibilidades de crecimiento de la formación de Cayo Lara en su posesión más preciada, fue totalmente inesperado. El golpe fue de tal calado que agrió el ascenso de IU respecto a las elecciones europeas de 2009. Si entonces obtuvo el 11,49% de votos en Rivas, el domingo mejoró hasta el 17,15%. Dio lo mismo.

La victoria de Podemos, con un respaldo del 21,09% (5.909 votos, 1.100 más que IU) ensombreció la progresión del partido que gobierna la localidad desde 1991. Rivas fue el premio gordo y el ejemplo más contundente del arraigo de Podemos, que superó a IU en 97 de los 179 municipios madrileños y en ocho de las autonomías. Se da la circunstancia de que Iglesias es pareja de Tania Sánchez Melero, oriunda de Rivas y diputada regional en la Asamblea de Madrid por IU. En diciembre de 2012, Sánchez aspiró al puesto de coordinadora regional del partido. Pero Eddy Sánchez ganó la batalla. “La creciente demanda social de un cambio nos impone una reflexión responsable sobre cómo darle respuesta. Trabajamos en un frente común”, se mostró ayer conciliador el coordinador autonómico de IU con el resto de fuerzas... Sin descartar a Podemos.

La conquista de Rivas, prácticamente de la nada, sin que Iglesias concentrara los esfuerzos de su campaña, resumió el hartazgo ciudadano con la pelea familiar que desde noviembre enfrentó, hasta su dimisión a mediados de mayo, al exalcalde José Masa con el coordinador municipal de la formación, Pedro del Cura. Y deja en el alambre un modelo de gestión made in IU famoso por la calidad de sus servicios públicos. Hasta el punto de haber atraído a una población cosmopolita que ha convertido la ciudad en la séptima con los mayores ingresos familiares del país. En semejante escenario de zozobra, Del Cura será nombrado, este miércoles, el nuevo regidor de Rivas.

“El resultado de Podemos es la primera constatación electoral del conflicto que hemos protagonizado los últimos siete meses. Hemos desperdiciado la oportunidad de recoger el voto descontento con el bipartidismo [en conjunto ha caído del 75% al 32%], principalmente con el PSOE”, analiza un responsable de IU. El crash del Partido Socialista, que de aglutinar el 42,36% de papeletas en 2009 se ha jibarizado hasta el 17,06%, lo ha exprimido Iglesias estancando a Izquierda Unida y dejando en su dirección una sensación de amargura pese a duplicar los 103.987 votos de 2009 en la región (4,54%). El domingo fueron el 10,51%, equivalentes a 232.492 votos.

“Iglesias ha aprovechado el agujero que le hemos dejado... Ahora que ha ocupado ese espacio, seguirá progresando”, barruntan en IU. A falta de saber si Podemos se presenta en los comicios locales y regionales de mayo de 2015 —donde la circunscripción ya no será única, como ocurrió en las europeas— IU domina el Ayuntamiento con 13 ediles, mientras el PP tiene siete y el PSOE cuatro. Un partido independiente dispone de otro representante. Un reparto que no tiene nada que ver con el de las europeas: los partidos presentes en el Consistorio sumaron el 49% de los votos emitidos en las elecciones celebradas este domingo.

Del Cura asumirá la alcaldía de la joya de la corona de IU con un equipo mermado tras las dimisiones de algunos de los concejales más experimentados del equipo municipal, como Fausto Fernández (regidor de 1995 a 2003 y primer teniente de alcalde con Masa), Luz Matas (concejal de Presidencia) y Yaiza García (edil de Deportes, Seguridad Ciudadana y Protección). “No me es posible ni por ética ni por coherencia política a mis principios seguir en el Gobierno de la localidad. Se ha antepuesto la ambición personal y la necesidad de alcanzar una alcaldía antes de ser ratificada por las urnas”, cuestionó recientemente García a Del Cura.

El coordinador local de IU lideró las críticas a Masa —para lo que se llegó a convocar un referéndum en el que los militantes críticos con Masa votaron a favor de su dimisión y el sector favorable al alcalde no acudió— a raíz de un informe de la Cámara de Cuentas de los ejercicios de 2010 y 2011. Este señalaba un desajuste contable de 20,9 millones en la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV). El informe también se refería a “depreciación” en la valoración de una parcela de 11 millones.

La comisión de investigación que abrió el Consistorio, con mayoría de la oposición y presidida por el PP, solventó que la gestión de la EMV fue correcta. Pero la conclusión no acabó con la fractura interna que ha descompuesto a IU en su plaza más preciada. Y que ha terminado dando alas a un partido que hace cuatro meses no existía.