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Condenado a 19 años y medio un vecino de Salt que degolló a su mujer

El asesino tenía una orden de alejamiento vigente pero vivía con la víctima

La Audiencia de Girona ha condenado a 19 años y medio de cárcel a Douglas Yair Ortiz, el hombre de 27 años a quien hace tres semanas un jurado popular declaró culpable de asesinato por degollar a su mujer el 17 de junio del 2012 en Salt (Gironès). Además, le prohíbe acercarse a menos de 1.000 metros de las hijas, la madre y la hermana de la víctima durante 29 años y le condena a indemnizarlas con 420.000 euros.

La sentencia de la Audiencia de Girona recoge el veredicto del tribunal popular y condena al procesado por un delito de asesinato con alevosía con el agravante de parentesco. Además, le impone otros seis meses de prisión por el quebrantamiento de una medida cautelar, ya que tenía una orden de alejamiento de la víctima, aunque ambos seguían viviendo juntos.

Una vez emitido el veredicto, la fiscal y las acusaciones solicitaron para el procesado 21 años de cárcel, 20 por el asesinato y uno por el de quebrantamiento de la medida cautelar. Por su parte, el letrado de la defensa, Gregori Martínez, que había mantenido que se trataba de un homicidio, pidió la pena mínima, 15 años y 6 meses. En este caso, la Audiencia de Girona no considera adecuada la pena mínima, “atendiendo al singular desprecio que la conducta del acusado supuso en todo momento para la dignidad y la vida de su víctima, así como la especial determinación que mostró a la hora de acabar con su vida”.

La sentencia considera probado que en la madrugada de los hechos el acusado mató a su mujer, de 21 años, de forma “totalmente sorpresiva” y sin que pudiera defenderse. El asesino se apoderó de un cuchillo de 20 cm de hoja y causó a la víctima una treintena de heridas. El jurado popular concluyó que, aunque la joven presentaba heridas “defensivas”, lo único que hizo fue intentar sobrevivir, no tuvo una defensa “efectiva”. A pesar de que le reconoce “que había consumido previamente bebidas alcohólicas”, mantiene que “esta ingesta no afectaba a su voluntad e inteligencia, de manera que pudiera comprender y querer el alcance de sus actos”, por lo que sabía perfectamente lo que hacía.

En cuanto a responsabilidad civil, deberá indemnizar a la madre de la víctima con 120.000 euros y a cada una de sus dos hijas con 150.000 euros.

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